Capitulo 6: el reencuentro

Negé con la cabeza a la pregunta que me hizo Kenner << Puede que no este aquí... Puede que no este en esta isla en este mismo momento...>>.

- Mira que gente tan rara - dijo la pequeña señalando al lugar.

Miré hacia allí y me acerqué a aquel corro intentando pasar para ver que había allí. Logré pasarlo y vi a Juvia, aquella chica de cabellos azulados que hace poco me había salvado de una muerte segura. Aquella chica a la que le estaba tan agradecida.
El hombre del que huíamos se encontraba frente a ella. Juvia estaba atada de pies y manos y amordazada. Me levanté y con mirada desafiante me aproximé a aquel hombre y lo cogí del cuello de la camisa intentando zarandearle varias veces.

-Maldito! ¿Qué le has hecho? Suéltala! - dije gritándole.

-Estaba perdida... sin duda era mi fin.. pero no importaba del todo.. había ayudado a alguien.. había conocido gente y aprendido mucho.. solo extrañaría mi libertad... el sentirme feliz de seguir viviendo.. ahora sería una esclava.. no sabía bien para que me necesitaban, solo sabía que ahora no podía hacer nada más que obedecer

Hey mocosa! que te pasa?! -abrí los ojos observando una escena que me sorprendió a más no poder, mi opresor siendo zarandeado por Nami... pero.. que hacía ella aquí?! estaba en peligro.. necesitaba ayudarla Tienes agallas para venir a hablarme así.. más cuando todos mis amigos ya están aquí -Aterrada observé como sus secuaces sacaban sus armas acercándose a Nami.. maldición! necesitaba moverme rápido para ayudarla..

Simplemente ignore los comentarios de la pequeña que señalaba sin pudor a una de las mesas por la orientación de sus dedos podía ver que se trataba de la mesa que yo había encontrado interesante volví a tomar otro trago mientras miraba al cantinero

- Sabe de algún carpintero por aquí, preciso reparar mi barco

Mientras ignoraba lo que acontecía un ruido me llamo la atención y fue ver a nami actuando de forma tan infantil que se dirigió de lleno hacia donde estaba la joven con aquellos piratas y empezó a sacudir a un tío de considerable proporciones suspire y tome otro trago antes que yuki hiciera una estupidez puse mi mano en su hombro y negué ella no interferiría en aquello, esos tíos parecían más peligrosos de lo que aparentaban solo observe de reojo aun con mi mano en el hombro de la chica para que no se escapara de aquí y interfiera en los acontecimientos, pude notar como los sujetos sacaban sus armas y empezaban a molestara nami seguí impidiendo a la chica de interferir mientras con la otra mano tomaba un poco de ron

- Cantinero, quienes son?

Pregunte el sujeto enseguida se dio cuenta de quien hablaba

La chica vió como Nami cruzaba la estancia hacia la mesa de los tipos raros y cogía por el cuello el a camisa a un tipo muy grande "Me cae bien esa chica" pensó la joven que intento seguirla pero Dragneel la detubo

-Pero si necesita ayuda...- se quejó la joven que miró a Kenner que seguía tan tranquilo, incluso preguntó al tabernero por el astillero -Si no hacemos algo le van a hacer daño...- apuntó la joven que se quedo sentadita

-No seas tan impulsiva, esos tipos dan bastante miedo- observó Hinata que también permanecía tranquila tomandose su ron

-Pues os veo muy tranquilos...- volvió la mirada hacia donde estaba Nami, los tipos e habían levantado y sacado sus armas

"Espero que no le pase nada ha esa chica, no esta en su mejor momento precisamente como para haber ido a meterse con esos tipos... pero me gustan sus formas" pensaba la joven que dio el último sorbo a su cerveza

Me llené de ira al ver a Juvia. Maldito... ¿por qué tenía de esa manera a Juvia. El hombre conmenzó a reir a carcajadas y mi furia aumentó aún más. << Bastardo... >>

- Que la sueltes!

El tipo cogió mi mano derecha y la aparto del cuello de su camisa al igual que hizo con la otra.

- Vaya, vaya... ahora te recuerdo. Ya van dos veces que intentas lastimarme. No saldrás viva de esta pelirroja. - dijo levantando su puño.

Ya veía las intenciones que tenía pero no podía pararlo tenía demasiada fueza bruta . El hombre me propino un puñetazo que hizo que fuera lanzada contra la pared y luego cayera al suelo. Ahogué un grito de dolor. << Tsk... es demasiado fuerte...>>

Vaya, vaya... ahora te recuerdo. Ya van dos veces que intentas lastimarme. No saldrás viva de esta pelirroja. - dijo levantando su puño-

-Me quedé helada viendo la escena.. parecía que pasaba en cámara lenta.. Nami estrellándose contra la pared, mis enemigos riendo y preparándose para dar un segundo golpe, estaba asustada.. no por mí.. si no por la vida de Nami.. recién había salido de peligro y estaba débil.. si tan solo pudiera..

Ora ora... Parece que esto término e inicio aquí...-dijo burlón- Mejor movámonos.. tenemos un barco que abordar y muchas cosas que robar..

Observe la reacción del chico mientras apretaba con un poco de fuerza el hombro de la joven para que no intentara escapar, la vi salir volando a nami después de que el chico le diera un fuerte golpe que alerto a todos y todo empezaron a mirarlos ya habían llamado mucho la atención así que escuche también cuando dijeron de retirarse suspire molesto y observe como se iban con la chica de cabellos azules tomada, luego que los sujetos pisaron el umbral de la puerta solté a Yuki para que fuera a ver a nami

- Ve a ver como esta la pelirroja

Dije mientras seguía tomando tranquilo mi ron y observaba al cantinero ya debería a ver armado mucho jaleo

- Sabes de qué barco pueden estar hablando

Le pregunte al cantinero a ver si sabía algo de aquellos sujetos que acababan de salir suspire y desvié la mirada a ver qué tal estaba nami después de aquel vuelo, esa chica no aprendía que no debía actuar de esa forma que dolor de cabeza me daba me dije a mi mismo mientras bajaba subía mi mano a la cabeza y me la acariciaba algo molesto, estas chicas me habían hecho el día mas difícil de mi vida después de la masacre de mi isla, este era el segundo peor día y algo me decía que no hacía más que comenzar esto, me tape la marca del destino mientras pensaba en todo lo que había pasado

Yûki seguía siendo contenida por Dragneel que le apretaba fuerte el hombro para impedir que saltase. Sufrió la escena en su propia carne, no pidía ver como la joven era golpeada y ella tenía que quedarse allí sentada, sin poder hacer nada "Cuanto deseo volverme más fuerte, no quiero tener que seguir mirando de esta manera sin poder hacer nada... me siento impotente" pensaba la muchacha que rompió sin darse cuenta la jarra que tenía en la mano de la furia. Los piratas dejaron a la pelirroja en paz y se dispusieron a salir, justo cuando abandonaban la taberna Dragneel le soltó el hombro y le dijo que fuese a ver que tal estaba la pelirroja que yacía en el suelo.

Yûki saltó de su silla y salió corriendo hasta donde estaba la joven, todo el bar estaba en silencio observando la escena. Nadie se atrevió a hacer nada. Little Girl llegó a donde estaba la herida y se arrodilló junto a ella

-¿Te encuentras bien?- dijo la joven mientras trataba de incorporarla un poco - Siento no haber podido hacer nada, no me ha dejado intervenir... - se quejó la joven- Dragneel es m ás raro que un perro verde. ¿Te has roto algo? ¿Crees que podrás levantarte?- se notaba que la joven estaba preocupada por la chica

Levanté la vista al escuchar los pasos de alguien viniendo hacia mi. Mis cabellos se interpusieron delante de mi cara ocultando mi rostro.
Escuché a la pequeña, parecía bastante preocupada. Yo solo me limité a sonreir y a responderle:

-Si, tranquila... estoy perfectamente.

Me levanté con dificultad y me dirigí hacia la entrada del restaurante dispuesta a salir en su búsqueda. No iba a dejarles marchar así como así.
<< No pienso dejar que se la lleven... No voy a dejar que le pongan un dedo encima. Ella fue la chica que me salvo la vida... >>

-¿A donde vas jovencita? - preguntó el camarero mientras se acercaba a mi.

-¿A usted que le parece...?


- ¿Sabe cuan peligroso son esos tipos?

Guardé silencio durante unos minutos.

- Me da igual lo peligrosos que sean. Tengo que salvar a mi amiga.

me sentía algo aliviada, al menos ya no molestarían a Nami, solo esperaba me dejara ir, si trataba de hacerles frente seguro terminaría más que herida. Sonreí internamente aunque por fuera se veían lágrimas saladas mojar mi mejillas

Tranquila Doc.. tendrás muchas amigas con las cuales platicar en el barco.. no está muy lejos.. es grande además tienes un lindo cuerpo, seguro divertirás a mis hombres por muuucho tiempo! hahahaha!! -dijo el hombre riendo burlona-mente mientras caminaban al puerto donde sus "nakamas" lo esperaban- Llevenla a mi camarote.. yo me divertiré primero.. además.. tenemos cuentas pendientes..

-Sabía lo que eso sinificaba. pronto perdería mi dignidad y seria el juguete del barco, solo me alegraba saber que podría llegar a escapar algún día. Un hombre de tamaño menor me cargó y llevo hasta un gran camarote.. el del capitán según percibí, me encadenó a la cama y se fue

Escuche lo que decía el camarero a nami y suspire desviando mi mirada hacia donde estaba la chica

- Ya escuchaste al cantinero, te quedas aquí

Mencione con un tono bastante fuerte no era un pedido era una orden enseguida volví mi vista al anciano con la misma mirada fría y seria que recién había hablado con mi tripulante termine de beberme el ron y lo mire a los ojos levantando un poco mi capucha

- Donde está atracado el navío de ellos

El sujeto se asusto mas con mi mirada que con la fama de aquellos maleantes que parecían tener una gran reputación en esta zona, mientras esperaba su respuesta señale el asiento que estaba a mi lado para que nami volviera, mientras esperaba la respuesta del sujeto a la cual agregue

- Por que son tan famosos asi, pues que todos le tienen miedo.

La chica pelirroja se levanto y trato de seguir a los piratas, pero primero el cantinero y después Dragneel le impidieron continuar a su camino. "Pobre chica, comprendo que quiera ir tras su amiga, yo también lo haría pero parece que Dragneel no está por la labor..." pesaba la joven que miraba hacia la puerta muy seria "Odio a ese tipo de personas que creen que por ser más fuerte que otras tienen derecho a causarles dolor... gente como esa es la que da mala fama a los pirtas" la joven apreto su puño. En verdad odiaba a ese tipo de gente "Debo hacerme más fuerte sólo para patear los traseros de basura como esa"
La joven escuchó como Dragneel interrogaba al cantinero, la joven retiró la mirada y volvió la vista hacia donde estaba el viejo.

-¿Vamos a ir tras ellos, Dragneel?- dijo la pequeña que aun permanecía más seria de lo habitual

- Ya escuchaste al cantinero, te quedas aquí - dijo Kenner con voz bastante fuerte.

Llevé mi mirada hacia el y lo miré durante varios segundos. Bajé la cabeza gacha y apreté mis puños con fuerza. Estaba llena de rabia... No podía dejarla con ellos.

Me dirigí otra vez a mi asiento y me senté en el cruzándome de piernas. << No quiero que Juvia sufra... >>. Miré a Kenner de nuevo al escucharle interrogar al cantinero. << Parece que no tendrá porque soportarles por mucho tiempo >> Sonreí de medio lado. Miré al frente y divise algo debajo de una de las mesas del bar.

-Esa es...

Me acerqué a la mesa y me arrodille para recoger lo que parecía ser una katana. Sería de algún tipo de los que se llevaron a Juvia. << No... esta es... >>.

-Mi katana! - dije sonriente.

estaba atrapada.. sin salida en esta gran habitación.. me acostumbraría a servir como esclava? a nunca poder hablar o actuar libremente? de cierta forma.. me dolía el no poder cumplir el sueño de mi abuela.. la que me había enseñado todo cuanto sé..la que me había salvado la vida en aquella ocasión..

Spoiler:

Oi! doc! tranquila! pronto vendré a una consulta completa! así que quita esa cara y mejor alégrate! hahaha! -la risa del hombre me sacó de mis memorias.. solo esperaba no se grabara en mi mente...

Suspire escuchando lo que el anciano decía

- Son una tripulación de cazadores, ellos se dedican a atrapar jóvenes como esa y venderlas luego como esclavas dicen que trafican frutas del diablo entre otras cosas algunos de ellos son usuarios según cuentan.

Suspire así que un usuario no sería nada fácil y estos tipos no se andaban con rodeos me levante y me di vuelta para irme cuando el sujeto me detuvo tomándome del hombro menciono

- Iran verdad tengan cuidado son piratas de mar abierto, no se andan con niñerías

Asentí en señal que le había escuchado mientras me disponía a salir del bar antes de eso e di vuelta y arroje unos cuantos berries a la mesa y observe a todas las chicas a ver que se disponía a hacer me levante un poco la capucha para que todos vieran mi rostro serio y algo cabreado

La joven escuchó las palabras del tabernero con calma "Será duro pero no podemos dejarla a su suerte, no quiero que nadie sufra si puedo evitarlo..." la joven sonrió cuando vió levantarse a Dragneel, el hombre mostró levemente su rostro. No tenía cara de muchos amigos

-Vamos, no pongas esa cara- dijo la joven alegremente mientras se ajustaba el pañuelo, camino hasta el centro de la estancia y se detubo justo en frente de Kenner -¡Vamos a patear el trasero a esos malditos!- gritó la joven mientras saltaba con el puño en alto

-Veo que por fin te has animado Yûki- se alegro Hinata que estaba algo preocupada al verla tan seria

-¡Sí!- la joven miró a la pelirroja -¡Lucharé para salvar a tu amiga aunque mi vida se vaya en ello! - dijo mientras sonreía de oreja a oreja

-Lo mismo digo- Hinata se levantó de su asiento -Pero necesitaremos armas, ellos estarán bien equipados y nostras no tenemos nada- observó la mujer

El camarero sacó desde debajo de la barra un arpón con punta de hierro y un alfalje -Quedaos con esto, son armas que se dejan los clientes. No sé quiénes sois pero espero que tengaís suerte pues la necesitareís-

-¡Gracias!- dijeron las piratas al unísono, Yûki cogió el arpón, Hinata por su parte cogió el alfalje

-¡Cuando tu quieras Dragneel!- la joven tenía apoyado el arpón en su hombro

El resto de la taberna observaba a aquel grupo tan vario pinto en silencio

Me levanté a la vez que miraba a Kenner. Parecía mucho más serio que de costumbre. No creo que le hiciera mucha gracia ayudar a Juvia. Y claro, tampoco sabía mucho de ella, solo que me había salvado la vida. Eso parecía ser suficiente para que Kenner me ayudaraa a salvarla. Es cuché a la pequeña y sonreí levemente.
Enfundé mi katana y me dirigí hacia él a paso ligero mientras me sumergía en mis pensamientos. << Tranquila Juvia... Pronto estaremos allí y te salvaremos de esos bastardos. No dejaré que te hieran ni lo más mínimo >>.

Apreté mis puños con tanta fuerza que me hice bastante daño. Suspiré e intenté relajarme. Estaba demasiado tensa. << ¿Quién me iba a decir que viniendo a esta isla iba a tener tantos problemas? >> La verdad era que me alegraba bastante de haber llegado hasta allí y de haberles conocido. A Kenner, la pequeña, Hinata, Juvia... Todos y cada uno de ellos eran muy importantes para mi. No podía dejar que les ocurriera ni lo más mínimo.

-Debemos darnos prisa Ken-kun. - le dije con mirada seria.

Cuando me disponía a salir escuche lo que decía nami y negué terminando de salir cuando ya se veía el cielo oscuro la tempestad se avecinaba mientras caminábamos por las calles oscuras en dirección al puerto donde estaba ese navío la gente parecía hacerse un lado marina no nos cruzamos ni ningún tipo de persona no decía nada solo tapado por la capucha la nube oscura parecía acompañarme ya que esta tapaba la luz del sol oscureciendo por donde nos dirigíamos este iba sin detenerse suspire llegando al puerta allí estaba el barco los guardias notaron algo extraño en nosotros los que vigilaban el navío mientras caminábamos hacia ellos yo coloque mis manos en los bolsillos del pantalón mi rostro era irreconocible a mi lado caminaban las chicas en guardia hasta llegar delante del barco nos detuvimos y los piratas nos miraron desde la embarcación, algo curiosos un hombre encapuchado rodeado de mujeres de todas las edades era algo que sin duda raro de ver yo grite sin mas

- Esta vuestro capitán aquí!!!

Uno de los piratas se sorprendió por el actuar de mí y grito

- Que quieres con el está ocupado

El silencio se hizo en el puerto nadie decía nada la nube negra termino de cubrir el lugar ya se podía sentir las primeras gotas tocando el suelo y el rostro de los jóvenes a mi me caían en la capucha sin levantar nunca la vista ni mover mi cuerpo hablaba

- Tengo cuentas que arreglar con el

El silencio se hizo de nuevo apenas se escuchaba señal de que esas nubes no solo traerían lluvia sino que tormenta también, se escuchaban los primeros rayos en el cielo y las luces empezaban a iluminar el lugar, la lluvia era bastante fuerte

Dragneel se puso en camino hacia el puerte, al salir de la taberna tan sólo un viento cortante arreciaba con furia mientras el cielo se iba volviendo cada vez más oscuro.

"Así que va a haber tormenta, un golpe de suerte, no creo que nadie salga a la calle mientras duré" pensó la joven que caminaba a la izquierda del encapuchado con su arpón en el hombro

El camino hacia los muelles fue batante fácil, no había nadie en el camino, tan sólo se podía escuchar a las gentes en sus hogares cerrando las ventanas las puertas de madera para que el viento no rompiese los cristales. No tardarón mucho en estar frente al único navió con tripulación visible, sin lugar a dudas tan sólo unos piratas eran tan atrevidos.

Dragneel gritó y la respuesta no se hizo tardar, las miradas de los marinos se centraban en aquel grupo tan variopinto, un tipo con una capucha rodeado de mujeres no era la típica banda que venía a amenazar a una tripulación de piratas

Yûki pasesaba la mirada por aquel barco, no era más que una goleta, un poco más grande de lo habitual pero una goleta al fin y al cabo "Es bonita, pequeña y manejable, si queremos huir de aquí podría ser una buena solución... pero antes deberíamos de limpiarla un poco" pensaba la joven alegremente

Un grumete respondió que estaba ocupado pero el encapuchado no ceso en su impetú, su siguiente frase sonó más como una amenaza.

-Se va a hacer de rogar ese pirata jaja- bromeo Yûki, que a pesar de que la lluvia comenzaba a caer con fuerza, su ánimo estaba en pleno apogeo. Ya no sentía el dolor de las heridas, tan sólo pensaba en que pronto habrían liberado a esa pobre muchacha y habrían pateado a esos piratas tan rastreros

Caminando hacia el puerto recordé el momento en el que Juvia estaba rodeada de aquellos indeseables, amordazada... Alcé la vista y divisé una embarcación, no era gran cosa pero mayor que en la que llegué a Loguetown si que era. En cubierta había varios de los tipos que se encontraban en la taberna; bebiendo, riendo, peleando entre ellos... Pero, desde allí no veía a Juvia. << ¿Dónde la tendrán...? >> El capitán no se encontraba con aquellos tipos a si que la única opción sería pensar que estaba con Juvia.

-Esta vuestro capitán aquí!!! - oí gritar a Kenner.

Todas las personas allí presentes nos miraban con cara de pocos amigos.

- Que quieres con el está ocupado - dijo uno de ellos. Parecía ser el Sub-capitán o algo parecido.


- Tengo cuentas que arreglar con el.


Sonreí levemente al ver a aquel tipo entrar en lo que parecía ser el camarote del Capitán.

Llevé mi mano derecha hacia donde estaba ubicado mi tatuaje y lo acaricie suavemente. No iba a ser posible llevarnos a Juvia así sin más. Tendríamos que pelear y yo no estaba aún en muy buenas condiciones. Mis heridas seguían igual aunque estaban mejor tratadas.

Capitán... lo siento.. pero quieren verlo.. -dijo uno de los grumetes con voz asustada afuera del camarote tocando la puerta, se separó de la chica ahora semi-desnuda y gruñó molesto- No tardo Doc.. quiero terminar este tratamiento..-dijo sonriendo malévolammente mientras salía de la habitación y cerraba con seguro-

"Maldición.. a cerrado.. -Pensé con molestia, si hubiera aunque no podía moverme del todo intenté quitarme las cadenas, aunque me era imposible..me sentía mal.. me empezaba a marear.. me habría dado algo para que no luchara cuando hiciera eso?

Posición y recuerdos:

No demoro en salir el Capitán pero antes había tomado sus debidos cuidado llamo a dos de sus oficiales para que lo acompañaran uno era un tipo lleno de marcas por todos lados y la que mas llamaba la atención era un corte que tenía en el ojo izquierdo el cual no podía abrir llevaba una ropa de pirata, pantalones amplios y una remera roja de manga cortas el sujeto intimidaba a cualquiera que se le cruzara en el camino y el otro sujeto era un hombre un poco más alto que el primero y sin cabello, su ropa parecía romperse por su musculatura ambos salieron del navío parándose sobre el casco del mismo el primero poniendo su mano en su katana y el segundo cruzado de brazos mirando como de pocos amigos el capitán sonrió y miro a los visitantes

- Que pasa, que os trae a mi pequeña morada

Dijo mientras levantaba las manos hacia arriba y inclinaba un poco la cabeza en señal de reverencia a los recién llegados luego de eso su mirada cambio

- No saben que tengo un tratamiento y la doctora me está esperando, no me puedo demorar mucho así que deseáis señores

El volvió a mirar al cielo viendo como se mojaría todo los piratas a su vuelta miraban sin decir nada y algunos hacían pequeños murmullos sobre los acontecimientos

Escuche el ruido de la puerta y no demoro en mostrarse el capitán rechiste algo molesto por los dos sujetos a su lado, no sabía que tan poderosos eran pero parecían tener experiencia, espero que estuviera equivocado desvié la mirada hacia las jóvenes que estaba a mi lado, tendría más una vez que pelear contra esos sujetos yo solo, tres contra uno sería difícil me dije a mi mismo mientras observaba que el sujeto empezó a hablar

- Que pasa, que os trae a mi pequeña morada

Levante mis ojos hasta entrar en contacto con los de él y suspire

- Un arreglo de cuentas pirata

Dije sin mas pero el sujeto parecía estar impaciente, se refería a un medico seria aquella chica bueno en realidad no me importaba di un salto y quede en el casco del barco a poca distancia de ellos y los quede mirando

- Golpeaste a una de mis nakamas, ahora pagaras por ello

Dije mientras posicionaba mis piernas para prepararme en caso que alguno de los dos intentara atacarme o el propio capitán, ahora si estaba alerta y nada podía meterse en mi camino

Kenner se disponía al ataque, había saltado hacia el interior del bote. La joven Yûki decidió no quedarse atrás y comenzó a correr hacia la pasarela que daba acceso al navío. Un enclenque pirata salió al paso y esta le propino un golpe con el mango de su arpón lanzandolo al agua.

-Vamos, ahí que rescatar a esa chica- dijo la joven mientras se posicionaba al final de la pasarela para permitir a sus dos compañeras subir, usaba el rango de su arpón para mantener a los piratas a distancia

-Bien hecho Yûki- Hinata paso justo detrás de ella -Nosotras no tenemos nada que hacer con esos tres tipos que atacan a Dragneel, pero podemos ayudar librandónos del resto-

-Entendido Hinata- dijo la joven que pego su espalda a la de Hinata -Pelirroja, tú todavía estás demasiado herida. Nosotras te cubriremos, busca a tu amiga- la joven arremetió contra un par de piratas alejandolos con la punta de su arpón

Hinata y Yûki mantenían a sus oponentes a raya, apenas se movía nadie, tan sólo se limitaban a mirarse esperando el primer paso del oponente