¿Cómo ser un pirata?

Me acababa de levantar, mire por la ventana a ver si había movimiento en la ciudad, pero esta parecía tranquila como siempre, me encamine al baño arregle mi cabello y me mire en el espejo mi nueva vida, una vida como pirata era algo horrible los odiaba y debía vivir como uno era lo que me faltaba ser malo como aquellos malditos que mataron a mi familia y mi isla, me mire nuevamente al espejo desordenando mi cabellos y terminando de vestirme, tendría que pelear con los buenos para que todos confiaran en mi como pirata suspire cerrando la chaqueta y tomando de la repisa unos guantes recubiertos de acero, los acomode en mi manos estirándolos y viendo que queden justos, termine de acomodarlos cuando me después a salir del cuarto, cerré la puerta y baje al despacho había alguien esperándome, para darme información de cómo actuaban los piratas locales el sujeto estaba esperándome en el comedor de la posada no sentamos a comer mi desayuno y el se

había pedido algo, me miro fijamente, parecía un pirata de esos viejos cansados de navegar trabajando para el gobierno, me eche para atrás cuando la mesera puso nuestros pedidos lo mire y dije

-Habla que tienes para mí

El hombre me mira y suspire parecía no muy a voluntad con lo que hacía pero le habían pagado muy bien imaginaba yo así que lo tendría que decir

- Los piratas locales…. Descubrieron que los marines esconden un gran tesoro en su base y se están pre… parando para atacar

El tipo parecía escupir las palabras con desprecio no le gustaba para nada tener que contármelo yo mantuve una mirada seria y fría sin importarme lo que me contaba como si disfrutaría haciendo aquello

- Algo mas dije tajante mirándole a los ojos el hombre pareció algo molesto y se levanto

Y no me dijo nada dejándome un papel doblado en la mesa y pago su bebida que ni la toco y se fue de la posada yo suspire recordando los datos que me había dado y tome el papel en este había citado el nombre de

algunas personas que eran responsables por la operación contra los marines, me tome mi tiempo para terminar de come y beberme su ron, al verlo terminado me dispuse a salir, caminaba por estas calles la gente ni me miraba parecía otro pirata mas con estas ropas llamativas y el peinado, así que con tranquilidad me después a encaminarme a la base de la marine local, un edificio poco cuidado no se para que piratas querían asaltar aquel lugar , bueno espero que el tesoro valiese la pena, entre a ver que tal era el lugar no parecía muy seguro, pero no significaba que no lo fuera un marine me paro

-Ciudadano le puedo ayudar en algo?

Yo lo mire sin expresión ninguna para luego cambiar a una leve sonrisa

- Señor quería dar una denuncia que hay un sujeto extraño de barba hablando con otro hombre en la cantina de la posada

El marine se volteo para atrás de la mesa para anotar mi ocurrencia en cuanto yo aprovechaba para mirar a los

alrededores escalera para el segundo piso, escalera que bajaba me imaginaba que allí estaban los calabozos, el marine termino y me pidió que firmara el papel lo que hize sin excitar ya que yo tenía miles de nombres falsos firme tranquilo y le sonríe al guardia saliendo, mire a los alrededores será que allí estaba el tesoro, no podría usar mis poderes y mi influencias de agente especial, pero aquel lugar tenía el protocolo típico de base avanzada de observación, lugar de descanso arriba sótano con salida oculta y los calabozos para los prisioneros, coloque las manos en mi bolsillos y comencé a caminar por la ciudad mirando a la gente, todos tranquilos otros parecían molestas y quejándose como siempre, pase casi toda la tarde en la plaza mirando a la gente, caminar a los piratas comentar y claro no perdí el tiempo entrando a las tabernas y preguntando

sobre el supuesto atraco al tesoro lo que despertó curiosidad de algunas personas que no se lo dejarían barato, ya atardecía el plan se llevaría a cabo no antes de ver quién era ese chico preguntón, me encontraba caminando por un callejón, dos hombres se pusieron delante de la salida y dos atrás se reían , yo no pude evitar reírme también habían caído en mi plan derechito, los sujetos me rodearon saliendo otro hombre de atrás de los que estaban a mis espaldas me voltee a mirarlo y mi sonrisa desapareció, había otro sujeto con un rifle en el techo mirándome a punto de mira el sujeto se encamino hasta a mí y se rio

- Me dicen que estas entrometido en mis negocios y que te trae por aquí

Yo sin mostrar señal de miedo o de soberbia simplemente neutral

- Soy un ladrón que busca desafíos y se corrió la voz por los mares que aquí habría un gran tesoro guardado por piratas en una gran caja fuerte, que es lo que me cautivo mi especialidad es abrir cajas, así que vine a ver si era cierto, mmm.. lo que parece poco probable

El hombre me miro con soberbia y me respondió

- Por qué dices que es poco probable sabes algo que no sabemos

Me apoye en la pared mientras hablaba y le mire para luego desviar mis miradas a los otros piratas

-no creo que hable mucho con tantos amenazándome, es algo intimidador no cree?

El hombre se ríe y me mira ordenando a sus chicos se replegaran me pone la mano en el hombre y dice

-caminemos a ver podemos ayudarnos mutuamente, yo sé que es una caja y no sé quien la pueda abrir y tu precisas de alguien que te meta allí dentro no, me extiende la mano que tal un trato y nos dividimos las ganancias

Sabía que aquello era mentira peor que mordida de tiburón, pero hacer lo que tenía que entrar y ganarme el titulo de pirata así que asentí y cogí su mano aceptando el trato

El me dio instrucciones de donde debía estar para empezar el asalto a la guarnición marine, asentí levemente y me voltee sentí como era observado el viejo no se confiaba mío y me había puesto vigilantes pero no era momento para encargarme de ellos, me encamine a la posada a esperar el horario, mientras me duche y acomode mi ropaje, mis guantes y botas principalmente una potenciaba mi ataque y la otra mis movimientos, ya casi era la hora Salí de mi habitación y ya había un pirata esperándome para indicarme el lugar, nos encaminamos hasta el lugar indicado, ya era de noche y no había nadie en las calles, nos movíamos rápido y con mucho sigilo, hasta llegar a una de las calles que se podían apreciar sombras eran 5 sujetos extraños allí uno me saludo era el jefe o por lo menos eso aparentaba, me indico el lugar que asaltaríamos era la guarida

que yo había citado, el me volvió a preguntar por qué creería que allí no estaba y le dije que estaba muy poco protegido, como ladrón profesional que era sabia que un tesoro no se escondía tan a sí o no querían llamar la atención, el viejo afirmo que podía tener razón pero dijo sin intentarlo no tendría sentido no?

Así que nos empezamos a deslizar por las sombras pero como era de esperar de piratas el sigilo no era su fuerte uno de ellos arrebató la puerta de una patada y dos más entraron con el luchando mano a mano con los marines que desgraciadamente les superaban en numero dos a uno, entre por una de las ventanas que habían dejado abierta junto con el capitán nos ayudamos mutuamente para subir al segundo piso por un tejado adyacente al del cuartel, entramos por la ventana y allí estaba el despacho del jefe y una gran caja el hombre me la indico para que la abriera y me reí diciéndole que cuidara de la puerta que podrían intentar subir, en cuanto el salió a mirar la escalera busque algo con que romper aquella caja y para mi suerte o mala suerte, estaban las llaves el sujeto pareció salir tan apurado que se olvido de guardarlas, sin más las cogí y abrí la caja quedando paralizado al ver su contenido.

EL hombre entro apurándome que nos quedaba poco tiempo y se acerco al verme estático para mirar dentro y quedar igual de su boca salió – mierda tenias razón y se volteo a golpear el escritorio con rabia y en cuestión de minutos teníamos a dos marines en la puerta impidiéndonos salir el viejo con rabia se sienta en el asiento y me mira suspirando yo lo miro y me acerco a la puerta en cuanto entra uno de los marines le apunta con su espada y el que venía atrás entra y le apunta con el rifle para que no se moviera pero no me vieron detrás de ellos golpe en la cabeza del que tenía el rifle con fuerza, con mis guantes de acero dejándole inconsciente de un golpe en cuanto tomaba el otro por el cuellos y lo tiraba al piso con fuerza, para luego acertarle una patada en el rostro y dejándolo en el mismo estado que el otro por desgracia al salir habían dos más que me vieron el rostro y apenas pudieron gritarme al escaparme por la ventana, suspiraba mientras saltaba por los tejados y maldecía no había encontrado mierda ninguna de tesoro y aquellos piratas eran más imbéciles de lo que pensaba.

Al otro día ya era buscado por robo y daño de patrimonio marine, visto como pirata peligroso y cruel debido a que había abandonado a mis nakamas para escapar.