Cada vez vienen mas molestos.

** Longuetown… La ciudad que ve crecer a una gran cantidad de piratas y marines a diario, de la misma forma que los ve partir, cada uno a destinos diferentes, donde sus metas y sueños comenzarían a cumplirse. Eran esos tiempos donde una especial cantidad de piratas embarcaba en los puertos para abastecerse de suministros… Aunque muchas personas odiaban a los piratas, saben muchas veces que son los mejores postores para comprar cosas, ya que siempre quieren muchas provisiones.
Era de noche, y la zona comercia había cerrado… Y la vida nocturna había cobrado vida, se observaba por las calles, las luces de las cantinas encendidas y como era de esperarse bulla dentro de cada una de ellas: sonido de vasos, personas gritando, peleas, etc. Pero en esos lugares no solo Piratas suelen reunirse, también Marines pasan de vez en cuando para satisfacer sus deseos de querer probar un buen trago. Cualquier excusa era buena para reunirse y beber algo… **

** Yamamoto se encontraba caminando por una calle, donde se encuentra uno de los lugares antes mencionados. En sus manos poseía aquellos guantes de color rojo, los cuales tiene gran apariencia a la vez… Eran diferentes al resto, ya que eran más grandes y de un material que soportaba el poder de la fruta que le joven es dueño. Los cuales tienen una “X” en todo el cristal, donde cruzan las palabras “Vongola Famiglia”, la tripulación de donde él es partícipe… Una tripulación pirata digna de temer, una que poco a poco se va haciendo reconocida por todos los Blues y quien saber por qué no en el Grand Line.
Su persona, con su mano derecha, empujó una puerta de una taberna, la cual al abrirla dejaba escuchar aquel sonido de una campana que siempre sonaba en señal de que alguien había entrado o salido del lugar. **

** Al entrar, como siempre dio un vistazo rápido. Personas ya se encontraban borrachas y tendidas sobre sus mensas, babeando. Otros tipos se encontraban con el vaso a la altura de sus bocas a punto de dar un sorbo, pero que se encontraban más concentrados en mirar a Yamamoto… ¿Algunos lo reconocían? Era casi imposible, puesto que su cabeza aún no tenía mucho precio, pero bueno, después de todo, ese lugar ya sabía quién era por la conmoción que causo no hace mucho. Se acercó a la barra como ya era típico cada vez que entraba en uno de esos lugares y pidió un buen filete con una pequeña botella de Sake. No demoraron nada en traer su pedido, no más de cinco minutos, y era una buena carne y una buena botella de Sake, sin dudas había entrado en un lugar de gran atención a pesar de tener una mala reputación… Claro, como el resto de bares a los que la gente de medio mundo cataloga de inmundos. **

**Cortaba cada pedazo de carne y se lo iba comiendo progresivamente… Pero fue en ese instante, en el que se encontraba ingiriendo sus alimentos, cuando se escuchó de nuevo la campana y con ellos a cinco tipos que hacían mucho revuelo, excepto uno de ellos que mantenía un perfil bajo. El de bajo perfil se encontraba calmado, mientras que los otros no se cansaban de causar revuelo, molestando a las personas que se encontraba solas… Era un fastidio ¿Quién más se encontraba sólo? El joven que comía tranquilamente también sería un punto... Y las personas ya se encontraban cada uno rodeándole.

-¡Yoy! Sí que hacen un poco de escándalo… Hahaha…

¿Por qué reía? No se sabía, estaba en una situación tensa, y solo atinaba a sonreír, pero bueno, su propia personalidad muchas veces era un poco difícil de descifrar, nunca estaba triste y nervioso, no cuando no se necesitaba. **

** Uno de los personaje, sin decir nada, agarró la botella de Sake y sin nada que decir, dio un sorbo y enseguida se lo pasó a sus compañeros, pero Yamamoto seguía con esa sonrisa, no parecía molestarle, después de todo aceptaba más que lo moleste a él que a personas inocentes con poca fuerza para defenderse en estos casos y más con cinco personas tan molestosas, bueno en realidad cuatro, el otro sólo se mantenía alejado de la situación.

-¡Carajo! Eres un tipo muy extraño… ¡Graaagh!

Ya se había exaltado uno de ellos… Cualquiera que lo veía notaría que sus facciones habían cambiado radicalmente, estaba de color rojo y enseguida desde arriba para abajo lanzó un puñete. **

** Yamamoto pasó su mano derecha al lado izquierdo, a un costado de su cara para defenderse del golpe que no fue nada fuerte y haciendo un movimiento de muñecas movió la mano del agresor. Ya se había iniciado una ofensiva y defensiva, ya era un combate entre cuatro contra uno de momento.

-¡Yoy! Si quieres seguir con esto… Vayamos a fuera, no es justo destruir este lugar… Jé!

La actitud del joven les molestaba mucho, ya que parecía relajado aún en esa situación. Enseguida salieron los cuatro tipos incluyendo al quinto de ellos. Se acercaron dos tipos, que sacaron cada uno unas katanas y comenzaron a correr en dirección al muchacho, ambos cruzaron sus armas, por diferentes flancos… Sin hacer más que colocar sus manos se defendió del ataque. Se tiró para atrás, para hacerles perder el equilibrio, fue en ese instante que aprovechó para darle a uno de ellos un golpe en el estómago haciendo que enseguida bote sangre por su boca y al otro un golpe en la nariz, dejándolo fuera de combate también. **

** Los tres que quedaban estaba sorprendidos, había acabado a dos de sus compañeros en contados segundos… Ahora estaban todos con los ánimos caldeados. Ahora estaba el turno de que tenía una pistola por debajo de sus ropas, la cual sacó y desenfundo de manera rápida y la puso en frente del joven…

-Muere…

Su error fue pronunciar palabras, puesto que Yamamoto pudo reaccionar a tiempo y agacharse, ya que era un tiro directo, no le iba a dañar, pero no quería mostrar que era un usuario de Akuma no Mi. Ahora era el joven quien corría, y cuando estaba frente a su objetivo, pegó un salto en forma de impulso hacia adelante, para que se elevara poco centímetros, y con su mano derecha, la parte contraria a su palma dio en su cara para dejarlo fuera de combate **

** El que había cogido el Sake hace rato era el que sobraba ¿Qué haría? Seguro era de ese tipo de personas que sólo demuestran rudeza, pero son los más débiles de los grupos… Sin embargo, se sacó el saco largo que tenía y se dejaron ver dos escopetas que cruzaban, puestas en su espalda, las cuales agarró cada una con una mano ¿Se podía hacer eso?

-¡Yoy! ¿Puedes manejar ambas a la vez?

Yamamoto se había “sorprendido”, ya que no era común ver a personas que sean capaces de agarrar semejantes armas con una mano cada una y no dislocarse el hombro en cada disparo. Comenzó a disparar, y en efecto, podía controlar cada una de ellas con una mano, y su puntería era acertada, por lo que hizo que el Bellwether se moviera de forma más rápida… Pero su destino fue el mismo, el puño del joven ya se encontraba en varias de sus costillas derechas, dejándolo fuera de combate también. **

**El último de ellos se acercó también… Y comenzó a hablar, sabía que era el tipo que había causado revuelo hace tiempo en Longuetown. Esas fueron las únicas palabras que se dictaron, ya que luego comenzó una lucha entre ambos, esa era más duradera, había un oponente entre todos de ellos que resistía más. Ya habían pasado tres minutos y seguían luchando, no es que fuera mucho tiempo, pero casi nadie podía resistirle más de dos minutos al joven Bellwether. Sin embargo, no tenía la idea de seguir prolongado eso, y mucho menos mostrar su fruta.

-Senpū (Remolino)

Se escucharon las palabras de Yamamoto, había usado su técnica remolino. Su cuerpo estaba abajo y dio una patada que se resbalaba por el suelo, en una vuelta de 360º grados, la cual golpeó al tipo e hizo que cayera, pero hacia adelante, una ocasión mala para este, ya que la técnica sigue en acción, con otra patada hacía arriba que golpeó contra su cara dejándolo fuera de combate. Demostrando que era más fuerte que las cinco personas… **