Misión:¿Un rey murciélago?

Después de mi largo viaje desde Tequila Wolf logré llegar a Loguetown, una vez allí amarré mi bote en una cordillera un tanto escondida e inhóspita y trepé por la cordillera hasta llegar a lo alto de lo que parecía una gran llanura. Algo cansado por el ascenso decido pararme a descansar al borde del acantilado observando el paisaje marino. Tras haber descansado un buen rato me pongo en pie y me doy la vuelta para analizar la llanura.

A unos metros parecía verse una pequeña cabaña, decidí aproximarme hacia la cabaña sin hacer demasiado ruido y una vez la alcanzo llamo 2 veces y comienzo a abrir la puerta, atento ante cualquier reacción sorpresiva. Sale un anciano y me saluda.

Saludo al viejo fríamente y le pregunto:
- Oye anciano, ¿sabe si hay alguna zona que merezca la pena visitar por aquí?
-No realmente. Me dice mientras se escuchaba un extraño ruido de gran potencia de fondo.
-¿Qué es ese ruido? Le pregunto al anciano algo intrigado.
El anciano baja ligeramente la cabeza y comienza a contarme una leyenda sobre el señor de los murciélagos. Me explica que se trataba de un murciélago de gran tamaño que era capaz de emitir y transformar ondas sónicas, mientras el anciano terminaba con su historia se escucha de nuevo un ruido esta vez algo más potente. Al escuchar el ruido lo sigo hasta el lugar de dónde procedía, llegando hasta la entrada de una gruta.

Comienzo a adentrarme en la cueva con cautela y al cabo de unos metros llego a una zona que parece una comunicación con el mar proveniente de un gran agujero en el suelo. Me acerco a la orilla del agua y me asomo ligeramente intentando descubrir que emitía ese extraño sonido. Al asomarme comienzo a ver subir rápidamente el nivel del agua, retrocedo ligeramente ante la incertidumbre del extraño fenómeno.

Mientras miraba hacia abajo del agua sale una ballena gigante con muchas cicatrices
Me quedo petrificado mirando el tamaño de la ballena, es gigantesca. Me quedo mirando a ver como reacciona ante los humanos a la vez que algo decepcionado por la historia del viejo.

La ballena me engulle de repente y me dejo dentro de su boca sin opción a salir.
-"Supongo que tiene la mala costumbre de ingerir cosas, eso significa que puede haber barcos y tesoros por su estómago supongo"-
Tras conjeturar sobre los posibles tesoros que podría tener la ballena dentro de su estómago comienzo a avanzar por su garganta rumbo a su estómago.


Tras lograr pasar su garganta sin demasiadas complicaciones, llego a una zona que parece ser el comienzo de su estómago, es como una gran sala con un techo altísimo y hay una especie de mar de agua amarillenta en la que se encuentran como pequeñas islas y barcos encallados.

-"Bueno supongo que la marea serán su jugos gástricos, y por el estado de los barcos parecen corrosivos"- Pienso mientras comienzo a caminar por la orilla de una de las paredes de su estómago para evitar el contacto con los líquidos, y avanzo intentando encontrar un punto que me permita saltar a un barco o isla sin riesgo de caer a la marea.

Tras mucho deambular alrededor de la marea de jugos gástricos acabo llegando a una zona desde la que parece que puedo abordar uno de los barcos que había en el interior de la ballena.
Logro abordar el primero barco pero al llegar a el unas extrañas criaturas viscosas y amarillentas comienzan a subir al barco desde la marea de ácidos.

Imagen:

-"¿Que son estas criaturas, y como podrán resistir el estar en los ácidos del estómago de la ballena? Espero no tener que luchar demasiado no creo que tenga mucho tiempo para jugar por aquí dentro"- Pienso mientras comienzo a desenvainar mi katana.

1º Barco

Me encuentro en un barco con 8 de esos extraños renacuajos y no parece que tengan intención de dejarme investigar sin presentar pelea.

- DESAPARECED¡¡¡¡ Les grito poco antes de lanzarme contra ellos.

Me lanzo hacia los dos renacuajos mas cercanos a mí que parecen los más agresivos y con 2 rápidos cortes les parto por la mitad, retrocedo rápidamente y me quedo observando a los demás, cuando por casualidad veo que los que había cortado se estas deshaciendo transformándose en el líquido del estomago y que de repente explotan erosionando parte de la cubierta del barco.

-“¿Qué demonios es esto? debo tener cuidado parece que son de un ácido tan concentrado que pueden derretir incluso la piel… eso me da una idea bastante buena para deshacerme de ellos”

Tras ver que no eran tan fuertes como pensaba, pero que es un peligro pelear contra todos ellos cuerpo a cuerpo, le lanzo mi katana a uno de ellos que se encontraba rodeado por algunos de sus compañeros. Tras lograr atravesarle dejando mi katana clavada en el mástil del barco el renacuajo se deshace y explota hiriendo a los que se encontraban cerca, al ver el resultado desfavorable del combate los pocos renacuajos que quedaban y los que rondaba el barco huyen despavoridos y aprovecho para recoger mi katana y mirar en los camarotes del barco encontrando una bolsa que guardo directamente en mi obi (cinturón).
-"Bien aquí ya esta todo terminado debo ir rápido al siguiente barco esto se esta moviendo mucho (el estomago, parece que esta comenzando la digestión)"- Pienso mientras en una rápida estocada corto el mástil del barco para usarlo como puente hasta el siguiente. Sin demorarme ni un segundo comienzo a caminar por el mástil que comienza a erosionarse por el ácido, y cuando estoy lo suficiente cerca del siguiente barco de un ágil salto me encamino hacia su cubierta.

2º Barco

Llego al segundo y último barco del estómago de la ballena, parece que los extraños renacuajos no tienen intención de molestarme más. Me adentro en los camarotes del barco y comienzo a registrarlos uno a uno, parecen saqueados la mayoría pero de repente en uno de ellos puedo ver una especia de mapa y una katana encima de una mesa.

-"Esto parece interesante"-
Al acercarme para comprobar veo que se trata de una katana muy bien elaborada pero que se encuentra petrificada, la cojo y la coloco junto a la mía en el obi y comienzo a examinar el mapa.

-"Mmmm que extraño, un mapa limitado por un circulo ovalado.... ¡¡¡¡Este mapa es del estómago de la ballena este es mi día de suerte!!"-

Tras comprender la importancia del mapa salgo corriendo a la cubierta del barco y comienzo a mirar el mapa y los pequeños islotes del interior del estómago intentando identificarlos.
-“Bien veamos en el mapa hay 2 islotes y aquí hay 3, una con una palmera otra con forma como de cuadrado y la otra solo tiene césped. Supongo que esta claro la que seguro no es.”- Pienso mientras de entre los 3 islotes reconozco uno de ellos como una de las islas que no están marcadas en el mapa, y comienzo a comparar las otras dos restantes para averiguar cual es la del tesoro.

Tras unos minutos comparando concienzudamente alcanzo a distinguir que una de las rayas en la isla no marcada significa que la del tesoro es la que no tiene palmeras y rápidamente levo el ancla del barco y comienza a moverse por las corrientes del estómago. Tras algún tiempo a la deriva el barco esta lo suficientemente cerca como para saltar al islote, y así lo hago.

Una vez en la isla marcada por el mapa al ver su pequeño tamaño comienzo a buscar en una zona que no tiene césped, saco mi katana y lanzo unos cuantos cortes y después retiro la tierra, encontrando un cofre de pequeño tamaño sin cerradura.

Me dispongo a abrirlo cuando de repente...

BoooooommM¡¡¡¡

De repente todo comienza a agitarse bruscamente parece que la ballena va a comenzar con su digestión y del techo empiezan a caer gotas de ácido.

-"Debo darme prisa en salir"-Pienso mientras guardo el pequeño cofre en mi obi y vuelvo hacia la zona por la que había venido tras algunos saltos un tanto arriesgados con el movimiento de los islotes, comienzo a correr por el inicio del estómago subiendo de nuevo por la garganta hacia arriba.

Mientras avanzo comienzo a urdir un plan para poder obligar a la ballena a abrir la boca dejándome salir. Comienzo probando a clavarle mi katana mientras voy avanzando, pero debido a su desmesurado tamaño parece no hacerle ni cosquillas.
-"Mmmm veamos... . . . . . . . YA LO TENGO!! Cuando llegue al final de su garganta me colgaré de un salto de su campanilla provocándole una arcada y saldré en ese instante"- Pienso mientras avanzo escalando por el tramo superior de su garganta usando la katana petrificada a modo de sujeción.

Tras unos minutos recorriendo el estómago mientras esquivaba cosas que caían incesantemente por su garganta rumbo al estómago logro llegar al final de su garganta y sin parar de correr me lanzo colgándome y estrangulándole la campanilla. Continuo corriendo mientras la gigantesca ballena comienza a tener ligeras arcadas, y de repente un viento que me levanta comienza a subir de la garganta y la ballena abre la boca bruscamente, de repente el viento que me estaba haciendo flotar comienza a empujarme bruscamente y me lanza con gran potencia, saliendo de la boca de la ballena casi a la entrada de la gruta.

El gran golpetazo me deja ligeramente conmocionado, pero tras unos instantes para recuperarme me incorporo y saco el cofre que encontré en el estómago de la ballena de mi obi, parece que contiene una inscripción en el borde pero está algo borroso “Kami-Koomori” , lo abro y veo que contiene una akuma no mi de no demasiado grande y un color oscuro casi negro, tras cogerla y fijarme más detenidamente en ella me la como de un mordisco.

-" Buaghh, que asco¡¡¡"-Pienso mientras comienzo a escuchar unas voces como muy a lo lejos.

-“¿Cómo puedo estar escuchando esas voces? Parece que estén demasiado lejos, y antes desde la cabaña me costó escuchar los gritos de la ballena”- Pienso mientras comienzo a prestar atención a la conversación.

-Vino un pirata con una espada y le envié a la gruta como siempre, pero después de un rato se empezó a escuchar ese ruido mucho más fuerte, no tengo ni idea de que puede haber sucedido. Se explica en tono de disculpa el que parece ser el anciano de antes.

- No creo que haya podido sobrevivir, todos los que entran en esa cueva acaban muertos. De todas maneras iremos a echar un vistazo, estad preparados chicos. Dice el que parece ser el cabecilla mientras comienzo a escucharles acercarse hacia la entrada de la gruta.


Antes de que los que pretendían ser mis saqueadores lleguen a la gruta guardo de nuevo el cofre, en el que al fijarme veo una nota, y me preparo mi katana para pelear con los que por las pisadas parecen un grupo de 3 personas.

Justo antes de que los saqueadores lleguen a entrar en la cueva la ballena vuelve a gritar como al principio.

- Falsa alarma muchachos, lo que sea que habita hay dentro sigue como siempre. Dice el cabecilla.
-Cierto jefe mejor volvamos. Le contesta otro de los saqueadores con cierto temblor en la voz.

Acto seguido los saqueadores se alejan, y yo aprovecho que la situación vuelve a ser segura para abrir el cofre y leer la nota que contiene.

“Esta es la fruta que he estado buscando durante años, por fin he conseguido la akuma no mi del Dios Murciélago, el problema es que he sido engullido por una ballena, mientras busco una forma de salir, dejo esta nota por si algo me sucediese sepáis que no debéis comeros esta fruta a menos que queráis convertiros en algo más allá de lo humano”

-"Esto se pone interesante"- Pienso mientras vuelvo a centrarme en mis capacidades auditivas, que por ahora me sobrepasan un poco a nivel de concentración.

Comienzo a analizar mis nuevos poderes mientras ya algo más centrado me encamino hacia la cabaña, por el camino voy mediante mi nuevo sistema auditivo siguiendo la pista de los saqueadores que parecen haber vuelto con el anciano. A unos escasos metros de la cabaña el anciano que se había quedado fuera de la cabaña alcanza a verme.

-Salid deprisa, ese era el pirata que envié a la cueva. Les dice el anciano algo exaltado, con su corazón latiendo como si se le fuese a salir del pecho.

Los saqueadores que se encontraban en el interior de la choza salen rápidamente causando un gran alboroto mientras recogen sus armas. Tras unos instantes los 3 salen por la puerta y fijan su mirada en mí poco antes de detenerme a unos 5 metros de la cabaña.

- No tengo ni idea de como has logrado salir vivo de la cueva, pero ahora mismo nos vas a entregar lo que sea que hayas conseguido allí dentro. Me dice el cabecilla del grupo, mientras le arrojo el pequeño cofre con la nota.

El cabecilla se agacha a recogerlo, instante que aprovecho para avalanzarme sobre él y golpearle con la empuñadura de mi katana en la boca del estómago. El cabecilla cae al suelo con una sensación mezcla de arcada y asfixia, los secuaces dirijen sus manos a sus armas envainadas, momento que aprovecho para lanzar una patada a uno de ellos estrellándole con gran fuerza contra un árbol cercano.

-"¿Como puedo haberle lanzado tan lejos? No creo haber hecho tanta fuerza." - Me distraigo ligeramente mientras observo la distancia a la que he lanzado a uno de los secuaces.

Slashhhhh¡¡¡¡¡¡
El secuaz que quedaba acaba de desenvainar su espada y la dirige hacia mí.

-"¿Qué es ese ruido?"- Me sorprendo por unos instantes mientras me desplazo ligeramente intentando apartarme de la trayectoria de la que proviene.El golpe de espada del secuaz B pasa por mi derecha sorprendiendome a mí mísmo.

-"Parece que mis nuevas capacidades van a resultarme más que útiles, creo que aprovechare que estos tipejos no parecen muy fuertes para practicar un poco más con mis nuevas habilidades"- Pienso mientras me distancio ligeramente para intentar adaptarme a mis nuevas habilidades y ser capaz de predecir los golpes de mi adversario con cierto margen de error.

El secuaz B lanza una nueva estocada hacia mí, concentrado en el sonido que causa la estocada analizo el golpe visualmente para ir comprendiendo el sistema de propagación de los sonidos. Esquivo el golpe con relativa facilidad, tanta que me sorprende a mí mismo lo fácil que me está resultando lidiar con este tipejo sin ni siquiera bloquear sus ataques. Tras fallar su primer ataque lo encadena con un nuevo golpe horizontal, el cual analizo concienzudamente para analizar diferencias, comienzo a ejecutar una maniobra evaisva para evitar el golpe a la vez que continuo analizando los sonidos que este emite. Tras esquivar nuevamente el golpe de mi adversario me percato de unos ruidos provinientes de el cabecilla del grupo, que parece estar recuperando el aliento tras el golpe asestado con mi empuñadura.

-"Parece que tendré que pasar al siguiente nivel de entrenamiento apresuradamente, aunque con el nivel que tienen tampoco debería ser mucho más difícil que ahora"- Pienso mientras comienzo a concentrarme visualmente en el secuaz B y auditivamente analizo solo sus golpes y concentro mi atención en posibles acciones ofensivas del cabecilla del grupo.

El cabecilla comienza a incorporarse apoyándose sobre sus rodillas, ya que por el sonido de su respiración parece que todavía no esta recuperado del todo. El secuaz B se lanza de nuevo hacia mí en una serie de golpes que intentan arrinconarme en dirección a donde se encuentra su lider.

-“Bien parece que ya les he dado el tiempo suficiente para que recuperen su ventaja numérica”-. Pienso mientras de nuevo alzo mi katana en posición ofensiva contra el secuaz B, mientras el cabecilla ya en pie adquiere una posición de ataque.

El cabecilla del grupo parece hacer un movimiento con su mano intentando evitar que me percate de lo que posiblemente sea una señal para su compañero. El secuaz B al instante me lanza una corte horizontal por mi izquierda y prácticamente al unísono comienzo a escuchar un sonido muy similar a la estocada del secuaz por mi derecha desde mi espalda.

-Demasiado predecible. Les digo a mis rivales mientras doy un salto lo suficientemente fuerte como para evitar los dos cortes horizontales a modo de tijera.

Los dos saqueadores se sorprenden lo que aprovecho junto al impulso de mi caída para asestarle un potente corte vertical al secuaz B regresando a una situación de uno contra uno. Tras el golpe el secuaz B cae a unos metros malherido y quedo ligeramente agachado y de espaldas al cabecilla del grupo nuevamente.

-MALDITO¡¡¡¡. Me grita el cabecilla del grupo mientras alza su espada verticalmente para asestarme un golpe por la espalda.

Realizo una rápida voltereta hacia la derecha para esquivar el golpe de mí atacante, haciéndole fallar en su ataque que golpea con gran potencia en el suelo levantando una ligera nube de polvo. Entre la pequeña neblina aprovecho mi sistema auditivo para ubicar al cabecilla del grupo y asestarle un potente golpe con la saya(funda) de mi katana a la altura de la garganta.

Coughtt¡¡

La neblina se disipa lentamente entre tosidos y un leve sonido parecido al gotear de un grifo, que poco a poco según la neblina se termina de disipar, alcanzo a ver que se trata del cabecilla vomitando sangre por la garganta entre sus abruptos tosidos. Me aproximo caminando hacia él mientras envaino mi katana y cuando estoy al lado le golpeo con mi katana enfundada fuertemente en la espalda, tras lo que el cabecilla del grupo cae prácticamente inconsciente a mis pies. Tras desarmarle dándole una patada a su espada y alejándola unos cuantos metros comienzo a aproximarme al anciano que se había quedado en la choza observando.

Mientras me voy acercando hasta el anciano este se mantiene inmóvil, parece estar tan atemorizado que acepta lo que le pueda suceder. A escasos metros del anciano le pregunto:

-Oye viejo, toda esa leyenda de antes, ¿Tienes algún libro o algo dónde la hayas leido?

El anciano se sorprende a lo que entre titubeos me responde que si. Me acerco hasta él en un gesto indicativo de que me diga dónde se encuentra pero el anciano está demasiado atemorizado para contestar por sí mismo.

-¿Y bien? ¿Dónde está el libro? Le pregunto al anciano mientras apoyo mi mano izquierda sobre mi katana agarrada a mi obi.

El anciano costosamente me dice que el libro se encuentra dentro de la choza, a lo que reacciono abriendo la puerta de una patada y “acompañándole” al interior de esta para que me diese de una vez el libro. El anciano pasa algún tiempo revolviendo entre varios libros y arrojándolos nerviosamente por todas partes de la choza tras lo que finalmente encuentra el que contiene la leyenda que me contó sobre el Dios Murciélago. El anciano se me acerca y agachando ligeramente la cabeza me entrega el libro, el cual recojo con mi mando derecha y guardo en mi cinto.

-“Ellos son jóvenes y su eficacia de no ser por este viejo habría sido casi nula en sus saqueos, te estaré agradecido por la leyenda pero tu vida terminará aquí”- Pienso mientras en un rápido movimiento desenvaino la espada y cerceno la cabeza del anciano de su cuerpo.

Limpio mi katana y la envaino de nuevo a la vez que salgo de la cabaña a verificar que ninguno de los saqueadores haya recuperado las intenciones de atacarme. Tras comprobar que todos se encuentran inconscientes o convalecientes me encamino de nuevo hacia el filo de la cordillera para comenzar con el descenso hasta mi bote.

Al llegar al filo de la cordillera me inclino ligeramente para ver el descenso que me espera hasta el bote y elegir la mejor posición para descender hasta él. Tras encontrar una posición justo encima de la del bote me doy media vuelta para prepararme para descender cuando de repente veo como el secuaz que había estrellado contra el árbol de una patada esta apuntándome desde lejos con un rifle.

El secuaz comienza a dispararme, por lo que me apresuro a comenzar a descender por la cordillera, cuando de repente uno de los disparos alcanza el filo de la cordillera en el que estaba agarrándome y me hace comenzar a caer hacía el mar.

Me encuentro cayendo al vacío sin opción posible para evitarlo cuando de repente todo se torna oscuro….

-Una silueta de unas proporciones gigantescas comienza a tomar forma en lo que parece ser mi mente. La silueta va tomando una forma definitiva similar a la de un arcángel o algo parecido. Tras unos instantes la ya formada silueta se acerca hacia mí mientras la escasa luz va permitiéndome ver su forma y color….. Graghh

De repente todo vuelve a tornarse oscuro y sólo veo unos gigantescos colmillos que se abalanzan sobre mí. Al instante recobro de nuevo la conciencia, pero mi aspecto físico ha cambiado, me parezco a la silueta de mi pequeño sueño. Sin tiempo que perder en un acto reflejo mis alas comienzan a moverse impidiendo mi caída sobre el mar a escasos 10 metros.

Imagen:

Al cabo de unos instantes parece que empiezo a adquirir conocimiento del manejo de mis nuevas extremidades, y con cierta torpeza me dirijo volando hasta mi embarcación. Tras tomar pie sobre mi bote de repente me destransformo y comienzo a sentirme algo exhausto. Preparo mi bote para partir y tras dejarlo todo preparado para el viaje entro al camarote principal para recuperar fuerzas mientras asimilo todos estos cambios. Al poco tiempo el bote comienza a moverse sin rumbo hacia mi próximo destino.