Me encontraba en mi pequeño cuartel sentada en una silla mientras me dejaba caer en la mesa apoyando el codo de mi brazo derecho y sosteniendo con la mano del mismo brazo la cabeza, estrujando así la mejilla del mismo lado. Miraba permanentemente la ventana mientras de vez en cuando soltaba un soplido. Sabía que había abandonado anteriormente la Marine, y que debía empezar de cero... pero por favor, eso para mi era estar en un número negativo. Un pueblecito de una isla tan pequeña de East blue, que la mayoría eran viejecitos sin mucho más de unos 20 habitantes que cuidaban una odiosas ovejas de colores (Y bien amigos míos, no digo lo de odiosas por nada, pues en cuanto llegué una de ellas me rompió mi cámara nueva). Las veía constantemente caminar de un lado para otro en el prado verde a través de mi ventana. Había veces que de tanto ver ovejas pasar temía dormirme, ¡menos mal que eran de colores que si no!
Cuando estaba a punto de dar otro cabezazo en la mesa un hombre de unos 37 años, fuerte, junto con dos viejecitos de unos 60 años, llegaron algo alterados a mi pequeño cuartel (pues debo comentar, que yo era la única Marine de la zona). Suspiré mientras que intentaba sonreír y los miré mientras me incorporaba.
-¿En que puedo ayudarles señores?- Les pregunté amablemente.
-Han-han desaparecido de nuevo ovejas.- Me contaron preocupados y con la respiración agitada, seguramente de haber venido corriendo.
-¿-¿Cómo que de nuevo? Yo no estoy informada de otra desaparición de oveja.-
-Es que…- Habló uno de los ancianos. - Creímos que fuera alguna bestia salvaje que habría conseguir cazar alguna, pero en ninguno de los dos casos a dejado sangre ni muestra de violencia.-
-Además nuestros perros nos hubieran avisado y hay huellas de personas que creemos que podría ser de alguna persona que las está robando.-
Lo primero que pensé fue `` Qué bien, algo interesante ´´ pero enseguida abandoné este pensamiento y lo sustituí por `` ¿Pero que estoy pensando? Esto es erio. Ha sido el interés por generaciones de estos habitantes y no puedo defraudarlos. ´´ Sonreí con mi mejor sonrisa tranquilizadora y me levanté de mi silla.
-¿-No se preocupen, yo me encargaré de atrapar al ladrón. Pero por favor, me gustaría que me mostrara el lugar de los hechos y tales huellas que encontraron; me parecen interesantes.-
Noté como se tranquilizaban y amablemente cerré el cuartel y ellos me llevaron dónde las ovejas habían sido robadas.