Regreso al nido

La mañana se había levantado fría, aún la luna mostraba su triste faz... que se igualaba a la mía, aunque Namida y Jack hubieran vuelto se palpaba en el aire que no estaban a gusto...

¿Y qué?, allá ellos, se lo merecen, he tenido que ir a derrotar a toda la base yo solita, siquiera se merecen estar en mi tripulación, necios que a la minima harían un motín... es que acaso siquiera ven lo que les ayudo, lo que les permito vivir aquí y recorrer aventuras, lo... lo que les impido que se conviertan... en... algo como yo... en alguien que aleja a todos...

Norcissa estaba en la cofia, le gustaba aquel lugar porque podía estar abrazada por la madera, escondida, lejos de la vista de todos... lejos de todos los problemas. Podía comprender porqué todos huían de ella... pero aún así, no quería verlo, no podía ser la muchacha que fue siempre... ya jamás podría. Simplemente suspiró, mientras la calcárea máscara se afianzaba aún más en su alma y bajaba del mástil, quedando mirando aquel tranquilo mar, y componiendo, con los sonidos de las cuerdas al viento.

Vuela, rápido, sigiloso, pensativo. Finalmente esta hecho. Paso mucho tiempo pero por fin logro consumar su venganza, y no se siente vació. La venganza no le sentó mal ni le hace arrepentirse. Esta a gusto, era algo que debía hacerse, así lo sentía. No algo que quisiera, que anhelara, no... era algo necesario, ya ahora por fin esta hecho.

Vuela en modo híbrido, portando en las patas una mochila y su pantalón puesto. Observa el mar de madrugada y entonces la ve. La dulce nave de los Demonsfire, el lugar que durante algún tiempo, tal vez demasiado corto para su gusto fue su hogar. No caería mal ir a ver.

Aterriza sobre la cubierta y vuelve a su forma humana, suspira. Tal vez ese barco pirata podría ser algo mas que una nave. Norcissa, su capitana, su amiga. Piensa en ella suspirando y deseando que aquella nave aun le pertenezca.

Me detengo... los pies sobre la madera, un sonido peculiar cuando estamos en mar abierto.. me giro lentamente, no puede ser...

Es igual que es, pero más mayor, es igual que él, pero más relajado, es igual que es pero más poderoso... es igual que lo sería el... pero... ¿es él?

-.¿..Poe...?- pregunto, sin poder creerlo... pero, quien puede ser si no.

-.¿..Poe...?- Una voz dulce, deliciosa y familiar. Stephen sigue su origen, y la observa. Aun dueña de esa nave, aun joven, aun gloriosa. Le sonríe.

-Ha pasado un tiempo, ¿verdad Norcissa?- Dice calmado y sonriente. Su voz se oye segura, mas madura.

Le miro... ha cambiado tanto, quizás demasiado... aún así, hay algo en mí que se alegra de verle.

- ¿ Donde demonios te habías metido? ¿Crees que me hace gracia que mis tripulantes se vayan a la primera de cambio? Y encima lo decidisteis toodos a la vez.- dramatizo, molesta, realmente molesta, acercandome a el para descargar mi dedo acusatorio sobre su pecho, varias veces

Ella se acerca y presiona su dedo contra el pecho desnudo de el. Molesta le critica, le regaña. Ahora el es bastante mas alto que ella. Sonríe y la abraza cariñosa mente.
-Te extrañe Nor. Era horrible aquel lugar, y había cosas que debía hacer. Pero me alegra estar de vuelta.- No la suelta se queda así unos segundos, abrazándola. Esperando a que ella reaccione y lo golpee o algo.

Hacía mucho que me hacía... falta aquello, un abrazo sincero... tardo en reaccionar más de lo que mi mascara pura haría.

- ¡Quita!- le aparto, suerte que aún llevo los guantes, quizás con demasiada fuerza hago dicho movimiento, me doy la vuelta, respirando, controlando la emoción que había aflorado tras la máscara, para volver a la pétrea faz. - Que sepas que como vuelvas a irte así sin avisar te juro que no te dejaré volver...- avanzo hacia adentro del barco- y encima te cazaré y mataré.

Ella lo retira de golpe, muy bruscamente. El se viste, toma su nueva camisa y chaleco y se la coloca encima. Norcissa continua regañándolo, y amenaza con no dejarlo volver la próxima vez, el sabe que significa. Es su manera de darle la bienvenida.
-Gracias Norcissa. Realmente aprecio que me aceptes de vuelta.- La sigue al interior del barco -Espero no tener que volver a partir.-

Espero dice, mira este.

- Y ahora mismo me vas a contar donde has estado, porque las cosas han cambiado bastante por aquí. Por poner un ejemplo Jack es ahora mi fiel y sumiso esclavo.- comenta, sin acordarse de la empatía que sentía Poe hacia ella y que quizá, ese dato pueda molestarle... quizás ponerle celoso. - Namida sigue igual de furcia que siempre y de malaje, y los demás se fueron todos, ah si, y hay un mariquita en la banda.

Norcissa le habla sobre Jack de nuevo, le molesta. Tal vez sea algo estúpido pero de alguna forma Norcissa ocupa un lugar en su corazón, el cual no esta seguro que es. Que mencione a Jack le hace sentir, molesto. Pero prefiere aclarar la duda de Norcissa.

-¿Donde estaba? La verdad, no estoy seguro. Tuve un extraño sueño y desperté en un horrible lugar, una maldita prisión en medio de ningún lugar con el estúpido nombre de La Isla del Tiempo- Quiere hacerlo sonar lo mas tonto posible, para de alguna forma superarlo. Pero solo recordar todo lo vivido ahí le da terror. -Y obviamente me cambio..... fueron seis años para mi Nor- Dice cabizbajo, su mente ya da vueltas por los días en la sala de torturas de la isla prisión.

¿Que le pasa al mundo con las paranoyas temporales? Putos guionistas...

- Vaya, a mi me paso algo parecido, unos días en un mundo sin tiempo... larga historia... bueno, no tanto, fui, maté a mi primer amor que se había convertido en un loco, salvé a una chica, conocí a mi... digamos némesis pirata, y conseguí estos guantes - moví las manos, mirandolos, si hablaba lo suficiente le sacaría de aquel trance. - Y ahora acabamos de asaltar... bueno, acabo de, Nami y Jack no hicieron nada... derroté a una poderosa marine, salgo en el periodico de hoy... tengo ahora el suficiente poder de mis artes brujeriles como para vencer a cualquiera... Naaah, lo típico.

Stephen sonríe, ella sigue igual que siempre. Nuevamente los malditos celos con el asunto de su "primer amor". Pero lo supera rápido, sonríe y se prepara psicologicamente para conocer a cualquier nuevo miembro de la tripulacion.
-Muy bien. Entonces solo indiqueme donde dormire capitana, y reanudare mis labores a primera hora de la mañana.- Desea descansar. Su cuerpo aun esta herido por la batalla contra los piratas en Shelltown.

Técnicamente ya es la primera hora de la mañana... ciertamente, me hace gracia que aunque se empeñe en ser más maduro, en el fondo... sigue siendo Poe.
- Puedes dormir donde quieras... aunque si te ves escaso de habitaciones, usa la mía, ya no voy a dormir...- abro el periodico que trajo el Cow News.- Que descanses Poe.

OFf Y cerrado.