Norcissa vs Marines

El marine se encontaba de espaldas a ti, amenazando con cada palabra y gesto al peloton de marines que se encontraba tiritando por su sola presencia. Fue entonces cuando lo noto, una cadena fria como el hielo, se atenazo en su cuello con la intencion de asfixiarle. Estaba convenientemente colocada bajo su brazo, rodeandole parte del cuerpo para impedir movimientos que pudieran detener la estrategia de Norcissa, sin embargo hubo algo que paso por alto... Aquella persona no era humana.

El brazo que no habia sido tocado por aquella cadena se movio lentamente hasta su cuello, mientras podias observar como la cara de aquellos marines al ver el rostro de su instrutor, comenzaban gradualmente a oscurecerse y a mostrar el mas puro panico. El brazo finalmente llego a su objetivo, tomo la cadena y unas simples palabras fueron escuchadas por tus odios. -¿Esto?... ¿En serio no tienes nada mas que ofrecerme niña?-. Preguntaba con una tranquilidad sobrecogedora, girando sobre su propio eje con algo de dificultad, aun con la cadena sostenida, evitando gracias a ello quedar incosciente por la falta de aire, para, segundos despues, sacarse la cadena del cuello como si fuera de juguete, provocandose en el cuello y parte de la cara heridas provocadas por la presion de tu fruta...Realmente era una bestia sin cerebro, poco le importaba su cara, o las heridas que le ocasionaras, no pensaba dejarse ganar y quedar en ridiculo delante de tantas miradas. Una vez se hubo liberado de la cadena, sin soltarla, tomo la parte de la misma que os unia a el y a ti, tirando de ella con la intencion de atraerte y tenerte dentro de su rango de golpeo. La potencia de dicho movimiento se vio reflejado en su espalda, ya que el giro que necesito para atraerte, provoco que la cadena desgarrara la ropa y parte de la carne, teniendo ahora parte del rostro y espalda ensangrentados.

De atraerte con la cadena, usaria el brazo parcialmente detenido por la cadena, el izquierdo, para golpearte en el cuerpo y lanzarte lejos, cosa que era visible al ver que los musculos de dicho brazo se habian ensanchado y mostraban las venas y arterias de las que estaba compuesto.

Y la furia, la rabia, se convertirán en dolor...y luego, en muerte... cómo a mí.

Una picaresca sonrisa apareció, me encantan estos butarates idiotas, solté la cadena, curvandome hacia atrás, doblando la columna (off: estilo MATRIX)y moviendo con mi poder el arpón y la cadena... sin exagerar, que quedara... realista... así sería mejor.. y tal era la potencia de su tirón, que el aguijón avanzó hacia el, en una trayectoria mortal.

El enemigo, aunque ciego de ira, no era insensible al cambio de peso que se produjo cuando soltaste la cadena, cosa que le alerto de que otra de tus jugadas estaba preparada. Observo la curvatura de tu cuerpo, sin darse a si mismo una respuesta convincente de porque lo hacias hasta que vio como aquel arpon se dirigia hacia el.

Por un momento su mente quedo en blanco, ¿como podia moverse con esa soltura una simple niña?, ¿acaso todo este tiempo su apariencia le habia engañado?, estaba algo atonito por lo que estaba ocurriendo, mas el miedo a la muerte le trajo de vuelta, no podia permitir que ese arpon le golpeara y la unica manera que se le ocurrio fue usar lo que tenia a favor, la cadena.

Tirando violentamente de la misma, el marine consiguio desviar la punta del arpon, sin embargo la velocidad que traia por la fruta de la pirata, hizo que le golpeara de lado, es decir, se llevo la totalidad de la barra de acero en el estomago, lo que provoco aun mas sangre en la espalda debido a que la cadena seguia hiriendo poco a poco al instructor y aquel golpe seolo habia servido para hundir mas la cadena en la carne. Comenzaba a sentir dolor, comenzaba a dudar, sin embargo no queria mostrarlo a los demas, su orgullo estaba por encima de las heridas y lo demostro tomando el arpon en su mano y clavandolo violentamente contra el suelo, dejando la mitad de este bajo tierra.

Lo uso de punto de apoyo por unas decimas de segundo, tenia que recobrar el aire, eso si, no apartaba aquella mirada de furia de ti, tenia que terminar contigo, no te podia dejar viva, no despues de lo que habias echo. -Niñata-. Dijo algo enfurecido mientras recobraba una postura ergida. -Acabare contigo-. Y asi fue como, en un rapido movimiento saco una pistola del cinturon, ocultada por el jiron de ropa que ahora tenia en su espalda a causa de la cadena, disparandote con la intencion de alcanzarte en un punto vital. Nunca antes la habia usado, de echo lo consideraba un acto cobarde, pero sabia que no tendria ninguna oportunidad para alcanzarla fisicamente.

Le he hecho enfurecer... eso es bueno, ha perdido tanto los papeles que su "entrenamiento" queda a merced de un objeto... oh puta, me va a meter un balazo. No daba tiempo a disponer una moneda, no siendo además una pistola de mano... Bueno, tengo un plan... es un tanto rebuscado, habrá que echarle talento, pero de eso... de eso me sobra

Moví mi capa, sacando a Niko, mi fiel y util marioneta, que adoptó la postura de mi enemigo. Imitandolo. Dispuse mi mano delante de mí, como si esbozara hilos, mientras dispuse a Niko enmedio de la trayectoria de la bala... pobre, pobre Niko... a la vez.. que la bala que yo poseía, describía una trayectoria contraria a la bala que él había disparadome, con el deseo de impactar en su pecho... al igual que impactaría en el de Niko.

- Black... vodoo...- y así, sin que lo supiera, había improvisado una técnica. Aunque he de decir, que menos mal que hice a niko a partir de basura y un leve armazón metálico... porque casi me como un puto balazo.

Los marines miraron atonitos como su lider, quien les maltrataba y cuya fuerza superaba con creces cualquier enemigo que hubiera tenido hasta ahora la base, caia incosciente, encharcado en sangre y con un orificio de bala en el estomago, exactamente en el mismo sitio que aquel muñeco extraño.

-¡¡¡B..bruja!!!-. Exclamaron todos al ver como habia fulminado al instructor y como se encontraba en perfectas condiciones, nisiquiera habia recibido un arañazo y eso que habia entrado sola a por la totalidad de la base. No era normal, ella no era normal y aquellos movimientos parecian estar dibujando el camino a la muerte.

-Ya es suficiente-. Finalmente llego, el maximo enemigo de aquella base para Norcissa. Los marines dejaron sus gritos y lamentos en un incomodo silencio, mientras aquella mujer caminaba con tranquilidad por delante de los mismos, quedando entre tu y ellos, dejando a Ethan entre las dos, sin nisiquiera dirigirle una mirada. - Por eso no vinimos en su dia a por ti, eres fuerte, pero tienes poco cerebro, basta un simple vistazo para saber que esta mujer no es de las que puedes infravalorar...¿cierto, muchacha?-. Decia con total tranquilidad, clavando sus ojos en ti y revelandote facilmente que este estaba analizando con ellos. Tenia un traje rojo, una gabardina de la marina abierta y apoyada sobre sus hombros, un cabello rubio de gran longitud y tal vez el rasgo mas caracteristico, parte de su rostro, estaba quemado, posiblemente en una de sus innumerables batallas, pues, aunque aun no habia echo ningun movimiento estaba claro que no era como el instructor...Tenia algo que te hacia dudar por unos segundos si atacarles habia sido buena idea.

Shofia:

-Soy la capitana Shofia D Marshall-. Se presentaba mientras daba una ligera calada al cigarro que estaba fumando. - No se muy bien quien eres, pero se perfectamente que no eres rival para nadie de los que se encuentran aqui, asique, para que permitir que nos burramos, comenzemos esto-. Segun te hablaba observabas un cierto instinto asesino en sus palabras, tenia una gran capacidad para contenerse y no lanzarse sobre ti. Deslizo entonces su mano hasta su cintura, extrayendo de la misma un florete, cuya empuñadura estaba decorada en tonos plateados y dorados, mientras que el filo estaba modificado, mostrando una forma espiral, como si fuera un taladro.

Dio entonces un fuerte golpe al viento, provocando que su capa se desprendiera de sus hombros y volara hasta el cuerpo de Ethan. -Llevenlo dentro, no esta muerto pero es grave-. Finalizo...Dentro de lo malvada que podia aparentar esa persona, era marine y como tal su trabajo entre otros era asegurar la supervivencia de cuantos pudiera.

"Saqueo".

Con inhumana velocidad me cierno sobre mi presa, un poco de ropa, la bala para el bolsillo tras sacar la de Nico, ahora tengo dos, aunque ahora no puedo sacar el arpón de la puta piedra... bueno, que se quede ahí, de algo me servirá. Creo que me ha preguntado algo...

- Marshall, aunque no se para qué quieres que lo diga... no se, me parece tontería, pero los marines no soléis ser muy listos... -el berraco este casi se muere, y sus amigos no parecen acercarse a por el. La mujer parece incomodada por mi total falta de respeto hacia ella, y por... mi suculenta broma. Así que volví a mi posición inicial, poniendome recta y tosiendo.

-...tu eres la que ha venido nueva.. o... otro de aquí de la base, así... de los que, bueno, ya sabes, no me interesan y tal...- comento. Moviendo la mano quitandole importancia, parece una mujer orgullosa, o al menos, de las que nadie les tose en la cara. Así que ya tengo manera de ponerla nerviosa.

Shofia fumaba calmadamente de su cigarro, apenas mostraba interes en ti mientras hablabas. -Vaya, debo disculparme-. Dijo despues de escuchar todo lo que tenias que decirle. -Retiro el cumplido que te hice antes...Aun estas lejos de ver el verdadero mundo que hay tras estos mares-. Por sus palabras, poco parecian importarle tus bromas, de echo, aunque era evidente que te estaba mirando, tenias la ligera sospecha de que miraba al igual que tu mirarias a un insecto caminando por el suelo.

-Mmm, querida, tal vez deberias ir a que te miren el sentido del odio, si he dicho a ese tipo al que as dejado moribundo que no vine a por el, creo que es evidente que yo no pertenezco a esta base-. Observabas que segun hablaba sus musculos se relajaban y parecia que a cada minuto te iba menospreciando mas, esa mujer no era de las que seguian las bromas, si no de las que las cortaban, a ellas y a aquellos que las pronunciaban con ayuda de su florete.

-Bueno imagino que al igual que yo tu no estas aqui para perder el tiempo en charlas estupidas-. Tras aquellas ultimas palabras, tomo una pose mas ofensiva y comenzo de una manera un tanto extraña, tomando una de las piedras del suelo, no mayor que el tamaño de una nuez, para despues susurrar unas palabras seguidas de una macabra sonrisa aderezada por la piel quemada de su rostro.

-Sentido unico-. Susurro, de manera imperceptible para ti mientras observabas como, aquella piedra, nada mas salir de su mano, potenciada por la fuerza que esta le habia dado usando para ello sus dedos indice y pulgar a modo de palanca, se lanzaba contra ti a una velocidad similar a una bala...Demasiado rapido... o aquella mujer tenia una fuerza sobrehumana en esos dedos, o tenia algo que esconder.

Gracias a los guantes me moví, como si fuera una marioneta, hacia un lado. Madre de dios con la puta piedra.

-...hijadeputa... Vamos a ver, ya que en cuestión de largo alcance, parecemos igualadas... qué tal a corto alcance?- Me dispuse en imitación de la posición de la grulla, si, algo cómico.- Adelante... te espero.

En caso afirmativo de que me atacara, caería en la trampa, pues giraría la cadena del arpón clavado entremedio de nosotras con mi técnica "Eje mortal", describiendo cadenazos uno tras otro sobre su cuerpo, a la velocidad de una potente licuadora. Al final, si que vino bien que fijara el arpón al suelo.

- Vórtice del Tártaro.

- Te dije que no estoy aqui para estupideces-. Aquella mujer iba en serio, sabia perfectamente que era una trampa, ¿porque? facil, primero aun no habia comenzado la pelea y segundo, aun no habia visto la manera de atacar de aquella pirata, ¿para que si no iba a ofrecerle un combate desde tan cercana distancia?, no estaba segura de que clase de trampa era, pero sabia que algo estaba escondido en aquella ridicula pose.

Ademas, miro detenidamente el movimiento de aquella mujer...Podria ser un baile pero la manera en la que esquivo la piedra fue bastante...Extraña, Shofia iba atanto poco a poco los cabos sueltos, desde que te vio pelear contra aquellos marines cuyas armas explotaron habia tenido ciertas dudas sobre ti.

- ¿Una usuaria de frutas eh?... O tal vez una artista teatral muy buena querida-. Dijo de pronto, sin que nadie mas pudiera escucharos. - Puede que a los demas les hayas engañado, pero tus movimientos, tu forma de realizarlos para ocultarte... Es evidente que tienes algo o tu o tus armas-. Definitivamente no era normal, desde que te habia echado el ojo habia descrito una ficha sobre ti, puntos fuertes, puntos debiles y sobretodo las posibles amenazas de muerte que corria si peleaba contra ti...Evidentemente no era informacion fiable al 100% pero provocaba que estuviera mucho mas atenta de todo lo que le rodeaba.

De pronto guardo silencio, y avanzo hacia ti con total tranquilidad, un paso tras otro, ignorando cualquier comentario sin nisiquiera molestarse a barrer el terreno con la mirada, solo la tenia clavada en ti, en tus ojos, sabia que tu eras el origen de todo y por ello no pensaba perderte de vista, fue entonces, cuando en un rapido movimiento en linea recta, trato de clavar su florete en tu abdomen. Tanto el movimiento como el tiempo te decian que era experta en el uso de aquella arma, el menor tiempo para esquivar, el punto mas dificil del cuerpo para apartarlo y la minima resistencia al viento.

Pegué mis brazos entre si, y estos al pecho, usando mi poder sobre los guantes moviendome hacia atrás, en un vano intento de esquviarlo. Y por esto, Jack debería estar aquí, a saber donde están el angel y el gato que no vienen... Poe no era tan independiente... hecho de menos a Poe.

- Aún no me has contestado si eres de los que han venido nuevos... porque de no ser así, no me interesas.- Mencioné, un tanto harta, no me gusta combatir, nunca me ha gustado.Aunque si tengo ventaja es divertido, pero ahora no tenía ni puta gracia.

Finalmente "la bruja" mostraba su humanidad, por el borde del florete comenzaban a deslizarse unas gotas de sangre que mas tarde caian al suelo, lentamente. -Muy bien esquivado-. Alago Sophia a la pirata, al ver que lo unico que le habia provocado era un ligero orificio de entrada en su estomago, nada grave, aunque resultaba molesto comprobar que aquella mujer rubia estaba a su altura.

-No pertenezco a esta base, es la tercera vez que te lo digo-. Esta vez volvio a una pose mas defensiva, colocando su mano libre bajo el codo que sostenia su arma, dejandola bailar de un lado hacia otro. -No se que tanto interes tienes en saberlo, somos marines al fin y al cabo-. Respondio con cierta ironia, esperando una respuesta por tu parte ante la herida...Estaba claro que esperaba algo de ti, tal vez enojarte y que finalmente mostraras el secreto de tus ataques.

Herida... eh... sangre... perfecto...

-...acabas de perder el combate... pues... mi sangre... sería tu perdición.- la miro, sonriendo, incluso mofándome.
-...Des...sanguinus.- "Warrior Nightmare" Su espada se torna hacia ella saliendo disparada de sus manos, atacándola constantemente, girando en el propio aire, golpe tras golpe. Sin cesar, sin conocer descanso.

-¿...Sangre, calaveras, vudú... por favor... acaso pretendías derrotarme si siquieras llegas a comprender el inmenso poder que la magia encierra?

Observaste como, ante el primer golpe aquella mujer caia de espaldas seguida de su espada, era brujeria, los cuchillazos se sucedian, tu misma eras testigo de como la espada danzaba sobre aquel futuro cadaver, estaba ganado...Oh, asi deberia aser sido, pero tras recibir varios golpes observaste que la espada se clavo de manera involuntaria en el suelo, tu no lo habias ordenado, pero habia ocurrido.

-Ahh, dios, pero mira que te gusta andar con juegecitos estupidos-. Se levanto, y lo que era mas increible, sin un solo rasguño, lo unico que pudiste ver era la totalidad de su pecho y abdomen cubierto por una flecha de color negro. -Vector Arrow-. Sonrio macrabamente mientras lo que deberian haber sido golpes mortales, solo habian agujereado parcialmente su ropa, algunos habian conseguido atravesar la carne ya que la velocidad a la que indician para golpear el cuerpo era superior a la que tenia la flecha para desviarlo, pero aun asi... Seguia viva.

-Parece que si eres una usuaria de akumas...Vector arrow...Lastima que no seas la unica-. En el pequeño lapso de tiempo entre aquellas dos frases (este ... XD), la siguiente frase te la estaba diciendo en el odio, seguido de un tremendo puñetazo en el estomago que te mando medio metro hacia atras. Lo unico que pudiste ver, una vez te recuperarte de aquel golpe, era una flecha negra en la misma ubicacion en la que ella estaba, descaneciendose lentamente hasta no dejar ningun tipo de rastros. -Lo siento por ti niña, pero si no muestras tu maximo poder, en el siguiente golpe te matare-. Amezante, simplemente escucharla helaba la sangre y en cierto modo sabias que tenia razon, ese poder era demasiado grande para intentar eliminarlo con estrategias y trucos.

vector arrow:

Estomago revuelto... dolor acuciante, posible rotura de algun hueso o organo... poder de akuma, flechas, direcciones... puede usar su propio poder sobre ella catapultandose, capacidad destructiva, brutal... pero aún así... es susceptible de fallos. Susceptible de convertir su poder en una desventaja.

Las cuerdas de mi guitarra fueron descolocandose solas... invisibles cuales hilos de pescar, tensadas, agujas son ahora. Ceso en mi control sobre los demás objetos, esto necesitará de toda la potencia. Seis cuerdas, seis agujas... las dispongo a mi alrededor, formando un invisible círculo, dispuesto a cerrarse y a cortar el paso, su velocidad será su perdición, la red se convertirá en arma.

Escupo, una mezcla entre saliva y comida pseudoregurjitada, no estoy para moverme despues de ese maldito impacto, si todo falla, adios a la función... y si todo sale como lo previsto... viviré otro día más. Esa mujer no se merece siquiera la vida... no, no la merece.

- Dime...- respiro costosamente- ¿Temes... a la muerte?...porque yo no.- y la desafiante mirada, es lanzada.

Shofia se encontraba frente a ti, su pose reflejaba la victoria pero su mirada la furia de sentirse infravalorada por una pirata de la que nisiquiera habia oido hablar. Sabia que tenia poderes mas increibles de los que mostraba y sin embargo seguia intentando vencerla por medio de burdos trucos y estratagemas...Estaba harta.

-Muy bien, parece que no quieres entenderlo, si tan solo te mostraras al mundo te resultaria facil dominarlo-. Comentaba, con una voz tranquila y totalmente seria, realmente creia que tenias la capacidad para llevarte al mundo por delante, sin embargo tus propias limitaciones iban a terminar llevandote a la muerte. Tomo de nuevo una calada a su cigarro, el cual no se habia caido de su boca desde el inicio de la pelea, aprisionandolo suavemente con sus labios.

En ese momento pudiste verlo, no estabas segura del todo pero jurarias que viste una sonrisa, sonrisa que se desvanecio al recibir de lleno tu golpe con las cuerdas... Se habia movido con su akuma para golpearte de nuevo, pero aquellas cuerdas atravesaron su cuerpo como el cuchillo a la mantequilla, algo rapido e invisible, pero que basto para detener el movimiento de tu enemigo, pero no su sonrisa. - Ya esta-. Dijo sin retirar su sonrisa, cayendo de espaldas y comenzando a mostras en sus ropas un color mas oscuro de rojo. Por un segundo pensaste que era lo que queria, perder...¿o podria ser una trampa?.

Movime con ardua rapidez hacia el lado, quizás si era una trampa, quizás... quizás había puesto flechas en aquellas agujas, y así, podrían clavarseme en mí.

Off: En caso negativo...:
Sonreí... aunque me inquietaba no saber qué es lo que pasò por su cabeza... quizá su propia mente distorsionó la realidad para no verse en la estúpida situación que ahora se encontraba, sustraje las cuerdas, volviendolas a poner en el instrumento.

-...supongo que ahora... es tiempo de irse...- porsupuesto tras un saqueo a sus pertenencias y un posterior vistazo a la torre de donde había salido, por si... bueno, había algo util, quizás un log pose... Y ya que estoy , una visita al polvorín tambien me vendría bien... con los muebles se alzaron un par de criaturas que llevaban mis objetos de forma un tanto macabra... la verdad, lo mejor que he hecho es usar esas técnicas, me dan una caracterizacion perfecta.

Shofia se hallaba tumbada en el suelo, perdiendo por segundos el brillo en sus ojos que habia mantenido durante la pelea, poco a poco la conciencia la iba abandonando. -Es ironico...Tantos años en la marina, para terminar muerta a manos de unas cuerdas de guitarra-. Se reia con la poca fuerza que poseia, liberando de la comisura de sus labios un pequeño hilo de sangre que aumentaba cada vez que entonaba una palabra.

No ofrecio resistencia, se dejo robar lo poco que llevaba consigo, sin embargo tomo la mano de aquella joven, aprentandola con fuerza para que no se marchara. -Debo advertirte...Esto no ha terminado-. En sus palabras podias descifrar un sentimiento de odio reprimido, fuera lo que fuese, aquello sobre lo que te advertia no era nada bueno. Una vez lo hizo se calmo, la fuerza que habia ejercido en tu brazo desaparecio y de nuevo se quedo tumbada, mirando al cielo como si solo estuviera ella.

En ese momento lo viste, como si fuera una mascara de porcelana, la personalidad que te habia mostrado desde el incio de la pelea se habia esfumado, simplemente quedaba aquella chica, de mirada tierna, como si todos sus problemas se hubieran caido con ella...Te traia ciertos recuerdos, pero tenias otros planes por lo que la dejaste alli en busca de tesoros de mayor valor.

A causa de aquella pelea y de las ordenes que dio Shofia antes de comenzarla, tanto el polvorin como el patio estaban deserticos, lo que te facilito en gran medida la infiltracion al mismo y ver todo lo que contenia, llevandote, con ayuda de tus esbirros, todo lo que consideraste valioso o almenos util. Acto seguido revisaste la gran torre, donde supuestamente deberia haber mas enemigos a los que enfrentarse, sin embargo no fue asi, debido a la derrota de su lider, todos se apartaron, dejaban los caminos principales libres, al igual que un amo con sus esclavos, caminabas infligiendo respeto con tu sola presencia. Notabas en las miradas de ciertas personas, concretamente aquellas que por sus ropajes sabias que pertenecian a la banda de Shofia, que estaban cargadas de trizteza, sabian que ella estaba por morir, pero podias leer en sus ojos que habia algo mas...Algo que acababas de despertar y que tenia en silencio a todos el cuartel.

Objetos:

Tomé los documentos confidenciales, los berries de la quemadita, el barril de aceite, y ya, no me hacía falta nada más... aunque siempre tengo sitio para la polvora, así que tambien, y no podría desperdiciar esas armas... bueno, todo para la saca, para algo lo llevan los bichos estos, aunque porsupuesto fueron tocados antes; tan solo dejé el den-den, ya me conseguiría uno propio para mí. Ciertamente me habían decepcionado en demasía mis subordinados... ya les castigaré mas tarde, al parecer solo puedo confiar en los guerreros animados con mi poder... o en Poe si estuviera, nunca me dio problemas. Regresé al barco, esperando mientras ordenaba los datos y leía pacientemente, tras claro está, aplicarme unos primeros auxilios a mis pequeñas heridas.

Fin tema cerrado.