Medianoche. Un angel cae.

Ya habían pasado horas desde nuestro peculiar abastecimiento en la ciudad, y ahora se nos veía gratificado nuestro, y con nuestro porsupuesto es mi, trabajo con la unión de dos integrantes, uno viejo y otro nuevo.

No habíamos cenado mucho, ni bien, algunos no se sentían con animos de comer, y otros, simplemente, preferían que cocinaran para ellos, véase, la bruja y el principe.Así, la noche cayó, y una creciente luna se erguía en lo alto, mientras anotaba en el cuaderno de bitácora otra aventura más.

La puerta estaba abierta, y la escasa luz de la luna era casi insuficiente para la escritura, pero el ambiente era propicio para quien esperaba.

-...no puedes dormir sin saber cual pregunta era... eh?- sonrio, apuntando una ultima palabra y dejando la pluma sobre la mesa.

Por fin habia llegado la noche. Las heridas, aun cerradas, me dolían bastante. No habiamos comido mucho, yo por no tener ganas, el resto por sus propios motivos.

Me dirigi a mi camarote, crujiendome la espalda < Maldita Norcissa y su manía de llevar demasiado equipaje > cuando paso por la puerta del camarote de la anteriormente citada.

Me la quedo mirando un rato, en silencio, viendo como escribe algo. A saber que pasa por la mente de esta arpía manipuladora. Hace, de repente, la pregunta.

Aun no lo he intentado siquiera. A ello iba. - Respondo, cinico, entrando a la habitación - Sin embargo, no estaría mal saberla.

Ciertamente... jugaré con la ventaja que tengo, ahora, mis planes se enrevesan cada vez más, y tendré a una confundida gata y a un extrañado angel danzando como marionetas que son en mi peculiar teatro. Pero lo primero de todo...

- La verdad... es que no es una sola pregunta, son... bastantes, quizás demasiadas, pero la mejor, la reservaré para el final...

- La segunda pregunta que te planteo, pues la primera... ya ha sido borrada de tu memoria, es... ¿porqué... no has utilizado la extorsión, el chantaje físico al poder "derrotarme" en combate? - puntualicé, levantando las manos y haciendo comillas, a la vez que me levantaba de mi asiento avanzando por la sala- Bueno, la respuesta tiene mucho que ver con la última pregunta que te haré... pero... ciertamente es que aunque... se diera el caso, no serías capaz.- la puerta se cierra con mi poder de golpe, mientras una silla desde su espalda le obliga a tomar asiento y las cadenas aprisionan sus brazos y su torso fuertemente a la silla, por si fuera poco, la bala que el otro día le extraje posa ahora sobre su cráneo, girando lentamente... yo nunca tiro nada que pueda serme de utilidad.
-...-sonrio, acercandome y posando mi pie entre sus piernas que yacen algo separadas, forzadas por la presión de la cadena, porsupuesto pasa por sus viejas heridas, si se suelta lo puedo tener bastante jodido, al menos es de noche y su poder es muchisimo menor.

- La siguiente pregunta... es... y tambien tiene que ver mucho con la respuesta de la ultima , ciertamente....- mencioné, pensativa, mirando levemente hacia arriba para luego posar mi mirada falconina (de halcón) de nuevo sobre él - ¿Es... porqué, pese a los acontecimientos que han pasado... y no enfrentarme, tampoco has huído... siquiera con Namida... tu pequeña mascota, y créeme, que a ella no le faltan razones para irse si tu la acompañas... -miro al vacio- sinceramente, creo que está aquí por tí, ahora que se ha quedado sin familia... supongo que tendrá la vaga esperanza de que tu formes parte de su familia, vivas feliz, compres una casa, os retiréis a una pacifica isla, tengáis hijos, y viváis el uno con el otro hasta que el ultimo sonido de vuestras vidas sea un "Te quiero" para el otro...- volví a la realidad, centrandome en las preguntas, de nuevo. -... lo que me hace pensar, que ciertamente te gusta estár en el barco...

- Así que tenemos varias premisas... no puedes hacerme daño, a pesar de no saber mi abrumante poder, te gusta estar en el barco... así que ahi va la pregunta...

Hice una pausa, para cernirme lentamente sobre el hasta abrazarle con el brazo derecho , juntando nuestros torsos para decir a su oído.
- ¿ Porqué... porqué te atraigo si piensas...- así te doy la oportunidad de que te comas el coco con esa unica palabra, piensas, dandote en ahelo de que no se así- que te hago cosas malas...?- dije, lo ultimo con un tono infantil, como dejando caer los carrillos de las mejillas, en una extraña tristeza.

Off: Y así es como la lío con personajes malvados, comecocos, y mafiosos.

Norcissa apunta que no es una sola pregunta, si no varias, pero que dejara la mejor para el final.

Sorprendeme - Digo, riendo, mientras entro a la habitación - Total, de ti ya me espero lo que sea.

Norcissa suelta que la primera pregunta fue " eliminada de mi memoria ", y la primera pregunta es porque no use el chantaje físico para eliminarla. Antes de que pueda responder, ella sigue hablando, diciendo que seria imposible que la venciese, y de pronto la puerta se cierra, una silla avanza hacia mi a toda ostia, obligándome a sentarme y unas cadenas me inmovilizan mientras una bala gira sobre mi craneo.

Sorprendido, miro a Norcissa, mientras ella avanza y pone su pie en mi entrepierna expuesta por la fuerza de las cadenas.

Como si nada, me hace la segunda pregunta, que es porque no me he ido con Nami del barco, huyendo de ella. Segun ella, es porque me gusta estar en el barco.

Su tercera pregunta llega cuando se agacha hacia mi para agarrarme con su brazo derecho y acercarse a mi, susurrándome al oído la pregunta. Porque me atrae si me hace cosas malas.

Durante todo ese tiempo, una voz en mi cabeza, diferente a la de siempre, pues esta es masculina, me incita a liarsela...A liarsela bien. Intento luchar, consiguiendo que no me afecte demasiado, pero la ira y el sarcasmo consiguen vencer al miedo y la sorpresa, por lo que mi expresión y tono de voz queda de tal forma que como si no estuviese atado, si no hablándole a un próximo cadáver agonizante.

Me inclino ligeramente hacia delante, para volver a lanzarme hacia atrás, aplastandole el brazo entre mi espalda y la silla, de forma que mi boca queda al lado de su oreja.

Primera respuesta, maldita loca: No me corresponde a mi matarte, otro ser posee ese papel...Y creeme que es peor que yo - Dicho esto chasqueo la lengua, saboreando la visión - Segunda respuesta: Al contrario que tu, somos gente de palabra, no lagartos que se arrastran por el suelo buscando debilidades en los excrementos de los demás, como haces tu. - Esto lo digo casi riéndome - Y tercera respuesta: A mi no me atraes...Puede que si a Jack, pero no a mi...

De un movimiento me vuelvo a inclinar hacia delante, de forma que ella puede liberar su brazo. La voz se ha ido, y yo vuelvo a mi comportamiento habitual, sorpresa y ligero miedo incluidos.

¿ Y a que te refieres con eso de " borrada de tu memoria " ?

Muy... interesante, a la par que expeluznatne ,la Y, denota que sabe lo que ha dicho... ha sido como un... soltar lo que tenía dentro, lo que me hace preguntarme si Jack no es ya el muñeco de otra... criatura.

-...tienes... cierto trastorno que te hace olvidar... ciertas cosas...- poso mi mano en su rostro, haciendo que me mire, cuidadosamente- Pero tranquilo, lo arreglaremos...- froto mi frente contra la suya, cerrando los ojos... si , así el personaje es creado, la Dama. La Bienamada.

Me quito de su lado, mientras la máscara muestra un leve sufrimiento, y un... quizás sería bien decir ansia.

Voy hacia el ventanal del camarote, mientras las cadenas le sueltan.
-...no te molestaré más.. supongo que querrás ir a dormir con Namida...- sigue esa máscara de dolor, como si me importara.

¿ Un trastorno ? - Pregunto, segundos después de que Norcissa apoyase su frente en la mía tras intentar tranquilizarme.

Ella se aparta, yendo hacia la ventana, mientras las cadenas se sueltan, casi llorando que yo querría ir con Namia dormir. Me levanto, tirando las cadenas al suelo, para dirigirme hacia la puerta. Sin embargo, aunque se que lo mas probable es que todo sea una trampa, me giro en la puerta.

Explícame lo del trastorno - Pido, a la defensiva - Y por que tanto cariño ahora si esta mañana y ayer me tratabas como a un esclavo sin compasión alguna ?

Va royendo su pequeña y maltratada mente... bien.

-...esos días... en los que todos desaparecimos... ahí ocurrió algo.. que cómo recuerdo extinguido en tu alma, solo permanecerá en la mía, torturándome... - miro mi reflejo.

- ¿Dime, si alguien no recuerda algo... de verdad ha pasado? ¿De verdad es...real?

< ¿ Esos días ? >

Miro a Norcissa, la cual no ha respondido a mis preguntas, si no que solo me elude.

Todo pasa en algún momento, lo recordemos o no. ¿ Recuerdas acaso tu nacimiento ? No, y aun así aquí estas...Puedes decir que se acuerdan tus padres, y yo te diré: ¿ Recuerda alguien el nacimiento de un huérfano ? Nadie. Pero existe - Digo todo esto sin dejar de mirarla - Todo es real, incluso lo onírico, pues a tenido lugar. Si no tuviese lugar, el Uroboro, la cosificacion perfecta del caos, lo absorbiera todo en una gran paradoja sin motivo ni existencia. - Me siento en la cama, dejando de mirarla - Tu, por ejemplo, eres junto con Nami y el resto de la banda una de mis anclas contra el Uroboro. Si os fueseis, yo no tendría razón de ser, tendría solo la esperanza de desesperanzarme...Nadie me recordaría, pero yo habría estado.

Y responde ahora a mi pregunta - Espero, ofensivo - ¿ Porque tanto cariño tras tanta humillación ? ¿ No crees que queda un poco raro que me trates así tras haberme convertido en tu esclavo y haberme usado sin compasión ?

Sigo sin girarme. Entrecerrando los ojos.

- Supongo... que me importunó que preguntaras por la situación de Namida con tanta... preocupación... - celos, dejo entrever- Se que es raro... pero... la situación lo es.... -aprieto los puños, fingiendo enfado, molestia.- ¡ Pero si deseas tanto que te humille lo haré , ahora fuera, Fuera¡

Esas cosas sin sentido tan típicas de una mujer celosa, si, enefecto estoy creando una buena máscara.

< ¿ Celos ? >

Sorprendido, miro a Norcissa, como aprieta las manos, intentando explicarse, para explotar luego prometiendo humillarme, ya que al parecer " me lo he buscado ".

< Se que esta mintiendo, que es un juego... - Pienso mientras me voy por la puerta, sin decirle nada, echandole una ultima mirada antes de girar la esquina - Pero parece tan...herida >

Marcha, más todo no ha acabado, no aún... cuando duerme, en el silencio de la noche, se cierne sobre su cuello, ajustandose con cuidado, marcando lo que es...

Y tema cerrado.