¿Casualidad o Destino?

La casualidad había hecho que el acorazado de la primera escuadra de la marina se encontrara en las inmediaciones, ni siquiera la más absoluta de las premeditaciones habría logrado que un acorazado en el que se encontraba uno de los marines más poderosos existentes, el vicealmirante Yamamoto, hubiera arreciado en aquellas aguas, y sin embargo ahí se encontraban.

Tendo estaba en el comedor, aunque no era la hora de comer debido a sus intensivos entrenamientos con el vicealmirante se veía obligado a aprovechar cualquier instante para darse el lujo de llenarse la panza, lo bueno que tenía era que los cocineros ya le conocían y le tenían por uno más en la familia, teniendo en cuenta que el propio Tendo cocinaba, además, las raciones que le sacaban eran considerablemente mayores que las raciones normales.

Estaba contento, era un gyojin pero era un marine, era probable que fuera único dentro de su especie, normalmente la marina estaba constituida por humanos, sonaba despectivo pero así era, independiéntemente de que muchos de ellos fueran usuarios o no eran eso, humanos, y el hecho de que un gyojin hubiera sido aceptado en sus filas era francamente asombroso, sin embargo el carácter afable y bonachón de Tendo le facilitó la integración en un grupo tan herméticamente cerrado.

"Piro, piro, piro, piro... katchak"

"Atención, se avisa al marine Kotetsu Tendo para que se persone inmediátamente en el despacho del vicealmirante, repito, se avisa al marine Kotetsu Tendo para que se persone inmediátamente en el despacho del vicealmirante."

"Katchak."

El anuncio por megafonía hizo que el enorme gyojin se pusiera presurosamente en movimiento al tiempo que agarraba su nodachi, Tenken, era extraño que el anciano quisiera verlo, ya habían terminado las prácticas por aquel día... aquello sólo podía significar una cosa.

--- En el despacho ---

- Sensei, ¿me ha hecho llamar? - era probable que Tendo fuera el único marine que se dirigía al anciano Yamamoto con el sobrenombre de sensei, a fin de cuentas no le había visto entrenar a nadie más...

- Si, pasa, - el gyojin entró en el despacho, pocas veces había estado en el mismo pero reconocía cada rincón tras la primera impresión que el mismo le había transmitido, mucho roble, madera de calidad extraordinaria, oscura y pesada, un reconfortante sofá a la derecha de la entrada con una pequeña librería, un minibar a la izquierda y en el centro la mesa central del propio vicealmirante, - hemos recibido un llamamiento a través del Den Den Mushi del marine Allen Sethzer, aparentemente se encuentra involucrado en una trifulca en una taberna llamada "Dark Bird" de esta ubicación, tu misión es asistirle y acabar con esa trifulca, ahora ¡vete!

- ¡Señor, si señor!

Por primera vez en mucho tiempo el enorme gyojin tuvo la oportunidad de cuadrarse frente a su instructor, una sonrisa de complicidad cruzaba el rostro del mismo cuando el gyojin emprendió a la carrera la marcha hacia la cubierta, saltaría desde la misma para ir nadando hacia la playa más cercana, a penas se encontraban a doscientos metros con lo que tardaría poco en llegar.

--- Llegando a la playa ---

Nada más llegar se topó con un grupo de pescadores que, al reconocer el uniforme de la marina, se sintieron extrañamente aliviados, aprovechó aquel instante para preguntar por la taberna "Dark Bird" y los pescadores le dieron las instrucciones precisas para encontrar el lugar, sin embargo también le advirtieron de que normalmente las disputas en aquella taberna eran habituales, así que sería mejor que tuviera cuidado.

Sin perder un instante dirigió sus pasos a través de los angostos callejones de la ciudadela para llegar a la taberna.

--- En la taberna ---

Ya desde fuera se oían los gritos y ruidos dentro de la taberna que aseguraban que, sin duda alguna, estaba teniendo lugar una confrontación, el gyojin no esperó un instante y entró en la taberna a través de la hoja doble de la entrada, sin duda alguna su presencia llamaría poderosamente la atención.

Nada más entrar pudo observar detenidamente que un marine se estaba haciendo cargo de la situación, se trataba de un jóven de piel clara cuyos ojos claros de un color que oscilaba entre violáceo e índigo en contraste con el negro azabache de su pelo recogido en lo que parecía ser una finísima cola de caballo, aparentemente era un joven atlético claro que su complexión poco tenía que ver con la del gyojin.

Tendo a primera vista le sacaría en torno a setenta centímetros y unos 80 u 85 kilos de peso, pero no debía dejarse engañar, el anciano Yamamoto aparentamente ser mucho más débil debido a su edad y era un auténtico monstruo.

Sin pensarlo un instante el gyojin se aproximó al marine cuando uno de los múltiples borrachos de la taberna fue corriendo hacia él botella rota en mano, el derechazo del gyojin no se hizo esperar sonando como un auténtico palazo y llamando la atención durante unos segundos de los presentes al tiempo que el cuerpo del inconsciente borrachuzo atravesaba el bar de lado a lado para estrellarse en la barra.

- Bien... seré breve, depongan las armas y tranquilicense, prepárense para su arresto por alteración del orden público, destrozos en una propiedad privada, alboroto y ataque a un oficial, si se portan bien no tendré que hacerles un daño irreparable, - y ante la duda respecto a sus palabras desenvainó la aterradora nodachi que llevaba consigo, aquella espada tenía un filo que excedía en gran medida al filo de la mayoría de las katanas, el gyojin fue andando hacia el marine, - Kotetsu Tendo, de la primera división acorazada, he venido en cuanto me ha sido posible... esperemos que se comporten como es debido.

Desde sus dos metros y medio observaba la escena, no parecía que se fueran a tranquilizar, y si hacían piña contra ellos dos...

Poly emergió tiritando de frío del minibar, se había quedado encerrado, por suerte, contaba con su pequeño abrigo de Poly Esquimal... aunque como el pico se quedaba fuera del disfraz, de poco le servía.

Repitio con pesadez la información, y tras descongelarse, partió donde el pez tambien había ido, subido encima de su mochila con ruedas, repiqueteando alegremente y empujandola con un palo a modo de Góndola veneciana.

- ♪ Il galleta míaaa... cuón pepitaaa... de cacahuetiii....♪ -canturreaba, - ¡JACHUS!; di la mia famigliaaa... di la abuelita la galletiiicaaa... di casa tarradeellaa... JACHUS- a pesar de su tamaño, los fuertes estornudos de Poly le permitían girar por los callejones montado en su peculiar vehículo, hasta finalmente, llegar, aunque algo tarde, a la escena.

No se para qué me mandan de vigilante y de "niñera", no es mi trabajo... para esto se les entrenan, pero por dios, soy capitán...

Ya parecía que la había liado el pez; encima había sacado su cachoespadajamonera.
-...Ey, ey, ey eeey.- extendí mis alas, hacia arriba, para llamar la atención.- ¿Queréis dejar de austar a la gente?¡ Pordios, tapate la cara o algo!- claro está que un gyojin con espada, no parece demasiado normal... ni tranquilizador; aunque tampoco un loro parlante.Diaría que el más normal es el chavalín.

[Off: Poly, en tu forma loro no veo galones ni nada que te identifique como marine así que te trato no como a un superior sino como a un desconocido, Allen, dado que tienes nivel 20 has conseguido el rango de teniente, hago referencia a ello.]

- ¿Eh...? - el enorme gyojin frunció el ceño al tiempo que levantaba una de las cejas, al escuchar las palabras del... ¿loro parlante? no pudo sino sentirse un tanto molesto, aparentemente la estrechez de miras era algo que seguía muy de moda en las filas de los marines, si es que aquel loro formaba para algo parte de la propia marina, - hummmm...

Desde su enorme estatura tenía control de prácticamente todo lo que sucedía en el bar, aunque aparentemente el recién presentado como Allen Sethzer había hecho un trabajo extraordinario, ni siquiera se había molestado en atacar pues los resultados serían bien distintos pero estaba claro que sin siquiera proponérselo había conseguido que los buscabroncas del bar se dieran una buena paliza entre ellos.

- Supongo que me he excedido, sin embargo la ley es la ley, una alteración del orden público dentro de una propiedad privada podría deribar en destrozos de la propiedad, heridos de gravedad y quien sabe qué más, - el gyojin miró tanto a Allen como al loro que no se había presentado, que tuviera la posibilidad de hacerlo y no lo hubiera hecho reflejaba que, sin duda alguna, debía de tratarse de un usuario, - aparentemente la marina ha enviado además a un usuario de una zoan que todavía no se ha presentado, ¿puedo saber su nombre? - el gyojin no apartaba la mirada del pájaro al tiempo que los contertulianos seguían un poco a lo suyo a pesar de la presencia de ¿tres? marines.

Luego escuchó el comentario de Allen, era cierto, no podían causar daños letales a los presentes dado que no eran piratas, eran simples borrachuzos, pero eso no significaba que no se pudieran defender.

- En caso de hostilidad está dictaminado que se puede y se debe emplear la fuerza estrictamente necesaria para reducir al máximo los posibles efectos adversos de una confrontación, significa que de seguir así la situación tendremos carta blanca para intervenir convenientemente, ya les hemos dado el primer aviso para que depusieran las armas... - el enorme gyojin aspiró profundamente y luego soltó el aire con tranquilidad, buscó al tabernero con los ojos pero éste parecía estar oculto, posiblemente debajo de la barra rezando unos cuantos padrenuestros, - dado que sólo soy un marine raso no tengo la potestad necesaria para ordenar hacer absolutamente nada, sin embargo todo empleado de mantener y preservar el orden público tiene potestad para ordenar a un conjunto de ciudadanos la deposición de armas y la cooperación para ser identificados y, en caso de necesidad, detenidos, si dicha orden no es cumplida queda establecido que se ha de utilizar cualquier tipo de técnica de retención que permita atrapar al máximo número posible de malhechores con el uso conveniente de la fuerza, así que ustedes dirán, teniente Sethzer, señor... loro.

El gyojin miró a su alrededor, desde su entrada y teniendo en cuenta el saludo que le había dado a uno de los borrachos éstos parecían más concentrados en obviar su presencia y la de los propio marines que en colaborar, el hecho de que alguno de ellos blandiera una botella rota, o un cuchillo de pequeñas dimensiones o lo que fuera no mejoraba las perspectivas de una colaboración ciudadana.

El gyojin envainó la enorme katana, con la misma envainada era probable que no representara una amenaza tan grande, pero un guantazo con un arma de semejante tamaño y peso, aun envainada, podría partirle un brazo a cualquiera de los presentes.

- Ah claro, presentaciones...- al menos, el pez había guardado su arma- Yo soy Poly , señor de las galletas y los bizcochos; Capitán de la marina- afirmaba. Aunque, no culparía a nadie de que esto, no fuera nada creíble.

Se acercó al gyojin, subiendo por sus ropas con destreza lorífica; hasta llegar a su hombro, sacando un pequeño papel de periódico.

- A mi no me digas hum¡- le dio sonora, pero sin apenas fuerza a la cabeza del medio pez- Tu superior soy, un respeto superioristico profesarme debes
.- alzó dos plumas al lado de sus orejas, imitando a un personaje, de un universo alternativo, el cual, todos conoceríamos por el sobrenombre de maestro, de nombre Yoda.

[Off: Poly, ¿capitán? ¿con nivel 27? capitán es a partir del nivel 50 según la jerarquía, con nivel 27 sigues siendo teniente como Allen... pero bueno, si como capitán te has presentado...]

- Capi... ¿capitán? - tenía que estar de broma... sin embargo el gyojin sabía que existían en el mar muchas cosas que él mismo desconocía y por lo tanto realizar un juicio previo de la posición jerárquica de una persona, o de un animal, o de un usuario de una fruta zoan como era el caso, sin conocimiento alguno fácilmente podía llevar a error, - lo... lo siento señor, - el gyojin se cuadró al oir las palabras de su superior, aquella escena debía de parecer realmente cómica, un gyojin de más de dos metros intimidado por un pájaro parlante, - no era mi intención ofenderle señor.

Las palabras del teniente Sethzer llegaron al gyojin a pesar de su estupefacción, repentinamente el rostro del hombre pez cambió mostrando un semblante serio, inclinó ligeramente el cuerpo hacia adelante separando al mismo tiempo las piernas, no sabía qué tipo de maniobra utilizaría el teniente para confiscar todas las armas de los borrachos pero sin duda alguna parecía estar muy seguro de sus posibilidades, repentinamente observó que el teniente se había quitado los guantes, y en las palmas de las manos tenía unas extrañas marcas como si de zarpas se trataran.

- Hummm... - el gyojin levantó su katana enfundada con la mano izquierda sobre los hombros al tiempo que se disponía a salir disparado hacia adelante, - capitán Poly, en su forma actual dudo mucho que pueda combatir adecuadamente, - hizo la presuposición de que se trataba de un usuario de una fruta zoan, de lo contrario que un pájaro hablara con tal soltura le parecería de lo más extraño, - su fuerza nos vendría realmente bien en este lance, en el momento en el que el teniente Sethzer desarme a los piratas me lanzaré a por ellos para tratar de inmovilizarlos lo antes posible, sin embargo son demasiados para atacarlos de una sola vez y es posible que traten de rearmarse lo antes posible, supongo que no hará falta que le diga que se prepare para una posible confrontación, señor...

El teniente Sethzer hizo su movimiento, se desplazó a una velocidad tal que el ojo de Tendo apenas tuvo tiempo para percibir el movimiento, sin embargo, aparentemente, en su movimiento de desplazamiento había arrastrado consigo las armas que portaban los borrachuzos del bar ¿cómo? ni la más remota idea, tal vez tuviera algo que ver con las marcas que tenía en las manos, sin embargo las armas no solo eran arrancadas de las manos de los borrachos sino que eran empujadas por la ventana a gran velocidad.

"En total serán unos veinte... tenemos cinco delante nuestro, dos grupos de cinco en las mesas de en medio y otros cinco en la parte que da a la venta por la que han salido las armas."

- ¡Voy! - sin más preámbulo el gyojin se lanzó al ataque impulsándose por sus poderosas piernas, aunque su movimiento, en velocidad, nada tenía que ver con el del teniente, sin embargo debido al asombro y a la borrachera de los causantes de aquella algarabía consiguió pillar al primer grupo desprevenido, el puño derecho del gyojin trazó un arco de abajo hacia arriba golpeando con contundencia el mentón de uno de los presentes, la cabeza del mismo se echó hacia atrás quedando inconsciente antes de aterrizar, un segundo borracho se giró para encararle, lo justo para encontrarse con la vaina de la katana en pleno rostro en un ataque descendente que lo dejó literalmente tieso en el suelo, los otros tres, al verse sorprendidos, se echaron hacia atrás con gran rapidez, sin saber que se les acababa el espacio, - ¡última oportunidad, vayan poniéndose de rodillas para que comencemos con la puesta bajo custodia, ustedes eligen!

La contundencia en los ataques era una forma eficiente de demostrar el daño potencial que el gyojin podía realizar, y aparentemente era más bien escaso en comparación con el que sus superiores podrían hacer a los borrachos, por eso era preferible evitar males mayores y que se rindieran, si el capitán o el teniente tenían que intervenir de alguna manera...

"Pobres desgraciados..."

(Off: El rango se me dio hace tiempo con los antiguos admins debido a que no había ningún otro marine, además de por meritos propios; pero seguramente ahora se me rebaje dicho rango... aunque Capitán Poly queda bien eh? xD)

Poly se agarraba fuertemente al hombro del gyojin, que, con contundencia y agilidad propinó severos golpes, mientras, estrupefactos, los compañeros de los brutalmente golpeados, miraban.

- La verdad es que yo estoy muy bien en esta forma...- ahora habíase posado encima de la cabeza del gyojin, sacando, de, a saber donde, una pequeña tacita de té apropiada para su tamaño, y sentado en la particular forma japonesa continuó hablando- Pero si os hace falta algun tipo de ayuda esporádica ahí estaré yo...- intentó beber, pero no le cabía el pico.

- No me cabe el pico....- dijo para sí, derrotado ante el poder de la asombrosa taza, golpeando la cabza del gyojin en puro despecho por la derrota de una taza.

[Supongo que el deshacerte del mobiliario incluye los taburetes, es para darle gracia al asunto XD]

Los tres borrachos que se habían echado hacia atrás vieron su camino entorpecido por las mesas así que decidieron mantener la posición, sin embargo dos de ellos tuvieron la insana idea de agarrar los taburetes en los que se habían sentado anteriormente para tratar de utilizarlos como arma, sin embargo, repentinamente fueron arrastrados por una especie de mano invisible al tiempo que se aferraban al taburete como si de un salvavidas se tratara, el gyojin no alcanzaba a entender qué era lo que sucedía, pero al ver una de las mesas salir volando abriendo un boquete en la pared comprendió que debía de tratarse de la extraña habilidad del teniente Sethzer.

El tercero en discordia se encaró a Tendo levantando ambas manos en posición de boxeo, sin embargo su mirada estaba demasiado enturbiada como para poder ver en condiciones, así que el gyojin aprovechó la situación para...

- Auch... ouch... ¿pero qué...? auch... - el gyojin agachó la cabeza hasta tres veces al sentir los instistentes picotazos del capitán sobre su bolo, - capi... ouch.. capitán, ¿podríauch... podría por favor estarse quieto? - en aquel momento de distracción el borrachuzo atacó con un jab (directo) de derecha, sin embargo el equilibrio no era precisamente su mejor aliado, y el alcance tampoco, utilizando la Nodachi envainada como si de un bate se tratara el gyojin giró la cadera para propinar un sobervio batacazo a la altura del húmero izquierdo al pequeño desgraciado proyectándolo hacia el otro lado del bar.

Al mirar al fondo del bar pudo observar cómo el grupo de borrachos volvían a pelear entre ellos al tiempo que un tipo grandote se abría paso en dirección a Allen, sin embargo el gyojin era incapaz de concentrarse con el pajarraco sobre su cabeza.

"Mierda de pájaro, sólo le falta cagarse encima mío..."

Del grupo de diez personas en la parte media del bar quedaban ocho en pie peleando entre ellos, y del grupo de cinco personas cercanas a Allen estaba el tipo grande que se acercaba hacia el teniente y otros cuatro divididos en parejas, zurrándose, a decir verdad podían simplemente dejar que se golpearan entre ellos para que el trabajo les fuera más sencillo.

- Capitán.. ¿hace falta que intervengamos? están demasiado borrachos como para saber quien es su amigo y quien su enemigo, - sin embargo al tiempo que pronunciaba aquellas palabras de la entrada al bar llegaron sendos ruidos, un par de detonaciones, - ¿armas de fuego?

Una cosa era que fueran un conjunto de aldeanos borrachos, otra que fueran un conjunto de aldeanos borrachos armados con palos y navajas, y otra muy diferente que fueran un conjunto de aldeanos borrachos armados con armas de fuego.

- ¡Mierda! - el enorme gyojin saltó para colocarse detrás de la barra, ¿de dónde habrían sacado esas armas? sabía que había dos tipos ahí fuera, curiosamente los dos que habían salido volando agarrados a los taburetes, y por la detonación debían de tratarse de pistolas de avancarga, podía oler la pólvora, aquello significaba que entre detonación y detonación tendría escasos segundos para acercase a ellos y derribarlos, alguno más teniendo en cuenta la cogorza que llevaban, - capitán, parecen haberse puesto violentos, ¡no habíamos previsto que pudieran usar armas de fuego!

Otras dos detonaciones, un par de botellas de alcohol situadas en la parte superior de la estantería de la barra estallaron derramando su líquido contenido, cuando el gyojin miró a su lado pudo encontrarse con el tabernero, muerto de miedo y agazapado con una escoba en la mano, aquello no le sería de mucha utilidad.

- Afortunadamente están demasiado borrachos como para hacer blanco, - una detonación, otra detonación ¿cuántas balas tendrían? otras dos botellas estallaron, a Tendo le preocupaba que por algún motivo inexiplicable el alcohol llegara a arder, si arrojaban un poco de pólvora y acertaban en la misma prendiéndola podía armarse una buena, de pronto observó un barril de cerveza de grandes dimensiones, debia de contener aproximádamente unos cincuenta litros de aquella bebida, acto seguido miró al tabernero, - la marina se encargará de pagar todos los desperfectos que sufra el bar, pero por el momento nos vemos en la obligación de decomisar ese barrir.

- Mi... mi baaaar... mi precioso bar... - el tabernero tenía la mirada perdida, era probable que no hubiera oido lo que el gyojin le había dicho.

Otras dos detonaciones, como si de un pistoletazo de salida se tratara el enorme gyojin se levantó a todo correr agarrando en el proceso con ambas manos el barril de cerveza tras haber dejado la nodachi en el suelo, haciendo acopio de todas sus fuerzas levantó el barril para comprobar, sorpresivamente, que estaba medio vacio con lo que su manejabilidad aumentaba drásticamente.

El barril de cerveza voló al otro lado del bar llevándose consigo a los dos pistoleros en el proceso en un estallido de madera, aros de hierro y gritos lastimeros de dolor, aparentemente la cosa no estaba mejorando, y aquello era un problema.

Agarrando de nuevo la katana el gyojin saltó la barra con un chute de adrenalina tras las detonaciones y los nervios a flor de piel.

Off: Cuanto post tan largo -_- me amargo. ( Vivan las rimas)ç

Hube de agarrarme fuertemente al gorro del Gyojin, ciertamente, se movía de manera brutal y además desconsiderada, desconsiderada para mí, yo era el invitado en su cabeza, no he pagado a la aerolínea para que siquiera me traigan cacahuetes...

Estabamos un poquito jodidos, tanto tio de por medio, y todos civiles, ¿Es que no saben cuando deben dejar de beber...?
¿Espera un momento, tanto civil armado... y bebido? Vale que haya algun par de borrachos en un bar , pero tanta peña? ¿ Y con armas? Salté del camondro del gyojin, volviendo a mi forma humana en el proceso, mano al suelo y probando la cerveza... claramente drogada.

Aquí hay algo más de lo que parecía en primer plano
¿ Pero quien tendría interes en malgastar esta cantidad de droga en los ciudadanos? La escupí, posiblemente... sería algo de una trama mucho mayor, quizás... les servian de conejillos de indias; habrá que estudiar el caso, sobretodo si no sabemos qué clase de droga es ...

Off: Es lo que veía más logico, tanta gente armada y borracha...

Pero por el momento, tenia que quitarme de encima a los que, por mi apariencia, venían hacia mí con claras intenciones de violación, posiblemente causadas por tanta bebida, o porque en sus oscuros corazones, eran así.
Y en silencio, comenzaba la danza. Tap.

Pero los cuatro mierdas que venian no era lo preocupante había uno de mayor tamaño, que avanzaba hacia aquel que estaba antes que nosotros, y hacia el, es donde me dirigía, para acosarlo frente a numerosas y constantes patadas.

El gyojin atravesó la estancia barriendo con todo a su paso, fuera lo que fuera lo que les estaba sucediendo a los ciudadanos parecía ser cosa de una especie de droga o algo similar, aquello era preocupante, incluso semiinconscientes seguían levantándose como hordas de zombies, sin aparente sensación de dolor en el cuerpo y con una sola intención, acabar con la vida del ser humano más próximo.

Cuando el gyojin observó la transformación del capitán no pudo sino darse cuenta de la serie de errores que había cometido.

- ¡Host...! ¡señor... digo, señora! - un drogado iba corriendo hacia él con una botella rota en la mano, la contundente respuesta del gyojin no se hizo esperar, con la parte frontal de la katana envainada golpeó la muñeca del individuo haciendo que apartara la mano armada, acto seguido trazó una clara trayectoria circular con el arma envainada de manera descendente golpeando la nuca del desgraciado dejándolo fuera de combate.

Observó también el comportamiento del otro marine, al oir la detonación del arma de fuego se estremeció, pero sus ojos se abrieron como platos al ver que el que caía herido era el que había efectuado el disparo.

"¿Qué demonios tiene en las manos?"

Poco a poco comenzaban a ganar terreno, aquello era bueno, sin embargo tenía que prevenir que alguien más entrara al bar, se giró para dirigirse a la puerta cuando de pronto entró un hombre de aspecto misterioso, era bajito, con unas gafas redondas ligeramente enturbiadas que evitaban que se pudieran ver sus ojos y una bata blanca, el pelo, ligeramente lacio y canoso, le caía por los lados de la cabeza con indolencia dejando al descubierto una parte superior completamente calva, llevaba además de unos guantes de látex de color blanco para darle todavía un aspecto más misterioso, parecía un médico o más bien un científico loco, llegaba escoltado además por dos tipos muy grandes y musculosos enchaquetados y erguidos junto a él, uno a cada lado.

A pesar de los más de dos metros del gyojin al compararse con aquellos dos hombres pudo observar que no eran precisamente pequeños, y que su musculatura estaba a la altura del propio marine, guardaban la distancia, más bien la medían, observó sus gestos durante un corto periodo de tiempo cuando oyó unas pisadas a su espalda.

El mismo borracho al que había incapacitado se había levantado, así que era hora de probar una pequeña hipótesis, el gyojin levantó por encima de su cabeza al desconocido que se afanaba por seguir combatiendo y lo lanzó violentamente contra uno de aquellos gorilas, la reacción no pudo ser de una mayor crudeza.

El tipo ni siquiera se inmutó cuando el cuerpo desgarbado del drogadicto lo golpeó sobre los brazos cruzados cayendo para caer posteriormente al suelo como un fardo de patatas, sin embargo, cuando el drogadicto volvió a levantarse le propinó un sobervio puñetazo en el lado izquierdo de la cara con su puño izquierdo, un puño que más bien parecía un mazo.

El impacto fue tal que de la misma inercia la cabeza del drogadicto acabó estrellada en el suelo, atascada literalmente tras reventar las tablas de madera de las que estaba compuesto el piso en el que se encontraban.

"Son fuertes, muy fuertes... y están bien adiestrados."

El gyojin desenvainó entonces su hoja, "Tenken" la primera en caer, la que se abre camino.

- Por orden de la marina les ordeno que se dispersen inmediátamente, - el gyojin miraba al hombretón que había aplastado literalmente al drogadicto, - nos encontramos resolviendo un altercado así que márchense, no podemos garantizar su seguridad, - no le pasó inadvertida la sonrisa de autosuficiencia del hombretón, ni tampoco su gesto de contrición cuando el hombrecillo, el científico, le atravesó con la mirada, - es... una... orden.

- Una orden de la marina... lo sé, lo he oido... - el hombrecillo hablaba bajito, pero con un tono de sorna en su voz, - sin embargo mi "misión" viene de más arriba, y por mi seguridad, como habrá podido comprobar, no se tiene que preocupar, - el hombrecillo levantó la mano derecha y chascó los dedos, como si de una orden se tratara los dos hombretones comenzaron a avanzar, - tal vez sería mejor que fuerais vosotros los que os dispersarais...

"'¡Maldición, yo y mi enorme bocaza!"

Los problemas parecían haberse multiplicado.

¿Pues claro que era droga, que iba a probarlos, por borrachería? Dios... novatos... Y por si fuera poco el ejemplar de gyojin ejecutaba más estupideces aún.

Si aquel hombrecillo tenía el permiso del gobierno mundial no podríamos , ni tendríamos que intervenir.

-...ruegole entonces que muestre sus papeles...- abrí mi maleta que previamente me había servido de transporte, dando la espalda a la escena, mientras de un movimiento rápido, me vestía sin tardar apenas diez segundos. ( A disfrazarse, técnica).- E ignore pues a mis compañeros, aunque no les vendría mal una lección.

[Como nota: no somos adversarios para los guardias dopados, pero el efecto se les pasará cuando completemos los posts, han sido drogados con una sustancia similar a los esteroides que usan los gyojin pero sin los efectos de la edad, la cosa es ponérnoslo chungo y sacar algo chulo de aquí, el científico puede estar a las órdenes de los revolucionarios por ejemplo ¿os parece?]

La "capitana" no tardó en reaccionar ante la escena, alrededor del gyojin los pocos drogados que quedaban comenzaban a dar claras muestras de indisposición, caían al suelo semiinconscientes con los ojos en blanco y espuma saliéndoles por la boca, aparentemente, fuera lo que fuera aquello en lo que estaba trabajando aquel tipo que ni siquiera se había presentado tenía claros efectos secundarios.

...ruegole entonces que muestre sus papeles...- Poly abrió una maleta que llevaba consigo y se ¿cambió? de ropa, - E ignore pues a mis compañeros, aunque no les vendría mal una lección.

- No tengo por qué dar ninguna explicación de mis actos, ni a usted ni a ninguno de los presentes, - la voz del hombrecillo era como una especie de sedante, no había mostrado ningún tipo de alteración al observar el cambio de disfraz de la marine y aparentemente ni siquiera le había dado interés, - esa respuesta también sirve para su compañero, - el hombrecillo observaba el acercamiento de Allen sin ningún tipo de preocupación, aparentemente confiado en las habilidades de sus hombres, o tal vez en sus propias habilidades, - si prefieren quedarse háganlo... - el anciano se acercó al cuerpo inconsciente del hombre que previamente el gyojin había lanzado contra uno de los guardaespaldas, sacando una jeringa se limitó a extraer sangre del sujeto, - yo ya tengo lo que buscaba.

Los dos gorilas se giraron observando al científico, éste, sencillamente, se limitó a asentir con la cabeza, acto seguido giró sobre sus propios talones y comenzó a andar tranquilamente hacia la salida como si nada de aquello hubiera sucedido.

- Aunque sinceramente... habría preferido que no se inmiscuyeran, mis hombres son muy leales a mi, pero no son nada sociables... - repentinamente el científico se paró en seco, como si hubiera recordado algo, con parsimonia extrajo de su bata lo que parecía ser un interruptor, lo accionó con tranquilidad al tiempo que por lo bajo emitía una pequeña risilla, - pronto lo comprobarán.

Repentinamente los dos gorilas se vieron sacudidos por una especie de espasmo, a continuación sus músculos comenzaron a comprimirse y a expandirse a medida que aumentaban de tamaño, poco a poco iban superando al propio gyojin en altura y musculatura, las maderas del suelo crujían bajo el peso de los dos mastodontes hasta que finalmente terminó la transformación de los mismos, el rostro, completamente deformado llamaba la atención, sin embargo lo que más poderosamente llamaba la atención eran sus ojos, eran de un color verde brillante, como inyectados en alguna especie de líquido luminiscente.

IMAGEN DEL ROSTRO:


El gyojin comenzó a hacer una serie de cálculos, estimó que medirían en torno a tres metros, tres metros y medio, su peso corporal una vez aumentada su masa muscular debía de ser de unos trescientos kilos, aparentemente eran bastante lentos.

- ¡No creas que te vas a ir así por las buenas! - el gyojin comenzó a avanzar hacia los dos inmensos guardaespaldas cuando, repentinamente, uno de ellos comenzó a agacharse y con un estallido de maderas a sus pies se lanzó hacia el marine.

"Qué veloci..."

El impacto fue bestial, sacudiendo las mesas por la fuerza de la onda expansiva del mismo y levantando parte del suelo bajo los pies del propio gyojin, un puñetazo como nunca le habían dado impactó en su rostro como si de un mazo se tratara arrancándolo del suelo y empotrándolo brutalmente contra la estantería del bar, clavándolo en la misma tras haber reventado parte de la barra a su paso, el gyojin pudo notar como la consciencia le pendía de un hilo.

El otro titán se interpuso entre el científico que ya había atravesado la puerta y los marines al tiempo que lanzaba un grito que sonaba más bien como un estertor de ultratumba.

¿Qué les había sucedido?

Tenían que capturarlos vivos... ¡a toda costa!

Por fin , había terminado de vestirme, una chaqueta pequeña y negra y una falda abierta, además de portar un dispensador negro entre mis dedos, acercandomelo a la boca e ingiriendo una vaina de galletas.

Porsupuesto que no iba a dejar que se saliera indemne, tuviera o no permiso de investigación, nadie, digo nadie, herirá a civiles ante mí. Y mucho menos un enano presuntuoso.

-Te prefiero como loro niña

- Lo se... yo también.

Apretaba mis puños, preparada para el cambio, mientras otros ya ejecutaban el suyo, moles de carne y hueso, moles que lanzaron a el gyojin como si fuera de papel.
Será... una prueba entretenida...

La transformación dio paso rapidamente, a escondidas de todos, mientras la gargantuesca y nueva figura encorvada aparecía. Y en su cara, una cara tonto.

(Off: Que soy como los guardianes de impel down)

[Poly, a los guardianes de Impel Down también les dan palizas XD pero bueno, a ver si vamos cerrando esto... los ataques son abiertos, esto es, pongo lo que hacen los gorilas, no lo que váis a hacer vosotr@s]

"¡DESPIERTA IDIOTA!"

Repentinamente el gyojin abrió los ojos, la voz dw su maestro había sonado fuerte, rotunda y profunda en el interior de su cabeza sacándolo de los brazos de la inconsciencia en la que el ataque lo había sumido.

"¡Qué fuerza... y qué velocidad!" aparentemente los dos gorilas habían sido dopados con una sustancia que elevaba sus capacidades físicas de manera sobrehumana, pero incluso teniendo el mismo gyojin una fuerza sobrehumana aquellos seres dopados eran todavía más fuertes, una brutalidad...

Al abrir los ojos el gyojin pudo observar la mirada aterrada del tabernero situado detrás de la barra, afortunadamente no se había visto afectado por el impacto del propio gyojin aunque estaba completamente aterrorizado.

- Tsché... - el gyojin se desencajó de la pared al tiempo que con el dorso de la mano secaba el hilo de sangre que manaba de su boca, - no tenga miedo, la marina le protegerá... nosotros le protegeremos.

Aquella vacía promesa dio al gyojin la fuerza que necesitaba para volver a la acción, al observar la escena no pudo sino arquear las cejas, Poly, la marine loro se había transformado en una especie de monstruo emplumado de enorme tamaño, incluso superior al de los propios monstruos, mientras tanto Allen había desaparecido de la escena, aparentemente siguiendo al científico.

- Poly... ¿podrás ocuparte de éste? - el gyojin se levantó blandiendo su katana, - sea como sea tenemos que evitar que el otro vaya a por Allen, tenemos que tratar de capturar al científico como sea.

Repentinamente el otro gorila transformado se giró a toda velocidad tras olfatear el aire, aparentemente sus capacidades sobrehumanas no sólo se limitaban a sus habilidades físicas, sino también a sus propios sentidos, mientras tanto el titán que permanecía en el bar, el que tan brutalmente había noqueado al gyojin observaba a Poly con la cabeza ladeada y una media sonrisa macabra en los labios.

- ¡¡Graaaaaaaaaahhhhhhhh!! - armando su brazo derecho se lanzó al ataque, la onda de choque del impacto sacudió el bar como una detonación.

Mientras tanto...

- Oh... en serio, ustedes no saben cuando rendirse ¿verdad? - el científico andaba tranquilamente, pero al oir las palabras de Allen se giró con toda tranquilidad, - aparentemente es usted capaz de realizar desplazamientos a alta velocidad... bien, muy bien, eso me permitirá mesurar las capacidades físicas de mis evolucionados.

A espaldas de Allen un par de ojos verdes brillaban con intensidad, con un rápido movimiento un brutal mazazo impactó en el lado derecho del marine, un golpe lo suficientemente fuerte como para partir los huesos de una persona normal.

Off:Si que les dan palizas, pero se las da el prota na más y a los dos minutos están como si no hubiera pasado nada XD.

- Yo puedo con uno de ellos si mantienes al otro. Pero no te fuerces, las heridas internas ocurridas pueden ser de graves- Proferí, con una voz que era exactamente igual a la de mi forma enana. Si... un tanto cómico.

El brazo se cernía sobre nosotros, pero , esta forma era la más poderosa que tenía.
Parrot Claw. El puño se detuvo mientras los tendones de su brazo eran perforados por la garra, la impresión del puño dejó en el aire un fuerte soplido que revolvió mis plumas, a la vez que una cara de extrañez en el rostro del zombie.

Parrot Trap. Piernas a su piernas y mi garra izquierda a su brazo derecho, mientras la córnea estructura de mis garras perforaba su carne, sangrante. Aunque he de decir que mucho menos sangrante de lo que esperaba.

Entonces curvé mi cuerpo hacia atrás, estirando un cuello que parecía algo menor de lo que era replegado; para descargar mi Peck Hammer en su cráneo.

- ¡PECK HAMMER¡

Habíamos logrado escapar de Sheltown con esa carcasa vieja que tomamos por barco y con mucha suerte logramos llegado hasta una pequeña villa que parecía bastante tranquila, gracias a las agiles y hábiles maniobras de nuestra navegante Aria ocultamos el "barco" en una pequeña ensenada rocosa que se encontraba por allí cerca.

Era el lugar perfecto para reparar y modificar el barco sin ser molestados, simplemente teníamos que conseguir los materiales comprándolos en la villa como gente normal y tranquila, para eso no llamaríamos la atención cosa que solo podría lograr yo que era el más tranquilo y normal de todos esos raros “Primero un reconocimiento del lugar y luego de confirmado la seguridad vendré con los demás lalala…” Caminaba tranquilo como siempre por el pueblito acompañado de mi querida Eliza, mi pequeña guarda-espaldas no me abandona y por eso la estimaba tanto.
No parecía más que un lugar de campo normal, con algunas tabernas que parecía hechas para atraer al publico piratesco y sin guardia de marines , perfecto para nosotros, un mercadillo de 3° que apenas podría alcanzar para lo que buscábamos pero eso es mejor a hundirse en medio del mar.
-Bueno es un lugar que nos sirve para nuestros propósitos, hecho el reconocimiento preliminar es hora de mojar la garganta en una de esas tabernas ¿No te gusta la idea querida?- Sin esperar su respuesta camino para donde estaban las tabernas que vi antes seguido por Eliza luego de dejar escapar un suspiro de resignación.

-Mmm… Esto es… Bastante interesante…- Me detengo a varios metros de la entrada de una de ella y me escondo detrás de una pared seguido de Eliza que sacaba su espada, un joven uniformado con una katana estaba parado frente a un monstruo enorme que parecía un zombie extraño
-Odio cuando se meten con mis gustos personales… Eliza cuando te diga saltaras y acabaras con el grandote aquel, cuídate que el gran jaleo que se escucha desde dentro seguro es porque también hay puede haber más de ellos… Necesito muestras de sangre y tejido, cerebro a ser posible mejor, no te contengas- Digo serio y no me hace falta dejar de vigilar a los 2 combatientes para saber que ella estaba sonriendo de una forma sádica mucho mayor que la que yo mismo jamás podre lograr hacer, era extraño que siendo tan serie le gustara tanto asesinar y desmembrar, tampoco diré que no me gusta… incluso excita a veces.

let´s settle this, a los monstruos, bueno, al que queda, ya lo manejo yo, si váis a atacarlos que sean ataques abiertos (que yo interprete lo que sucede en mi siguiente post) dejando claras vuestras intenciones.]

El gyojin se cubrió el rostro para evitar cualquier tipo de daño, sólo la onda de choque producida por el ataque del engendro había conseguido arrastrarlo ligeramente hacia atrás, sin embargo al volver a mirar dónde se encontraba su emplumada compañera observó que ésta había neutralizado por completo el ataque, no sólo eso sino que había inmovilizado a la criatura.

"Joder... ¡¡qué fuerte!!"

Repentinamente el enorme loro echó la cabeza hacia atrás y...

- Puaj... - un desagradable crujido se produjo cuando el pico del loro se incrustó literalmente dentro de la cabeza del titán, movimientos espasmódicos comenzaron a recorrer su cuerpo a medida que los ojos miraban hacia arriba hasta quedarse completamente en blanco, cayó de rodillas y después simplemente murió, pero aquello no fue lo más extraño, - ¿qué demonios...?

Una especie de vapor salía del cuerpo del titán a medida que éste iba recuperando su forma humana progresivamente, ni el gyojin ni la marine lo sabían pero aquel gas era completamente inerte, inodoro e insípido aunque con un color verdoso realmente extraño, aparentemente cuando las funciones vitales del titán transformado cesaban la droga que le había sido administrada desaparecía del organismo en forma de vapor verdoso.

- ¡Cuidado... puede ser peligroso! - instintivamente el gyojin tomó prestados un par de trapos de cocina y, poniéndose uno en el rostro le extendió el otro a su compañero, - saldré a fuera para ver qué sucede con Allen.

Tomó aire y corriendo a toda velocidad atravesó la nubecilla verde para salir al exterior.

En el exterior...

- Reflejos, fuerza sobrehumana, destreza y habilidad... - el científico parecía estar enunciando las habilidades de Allen al observar su forma de evadir el ataque, repentinamente se llevó la mano al oido y acto seguido miró su propio antebrazo, del antebrazo se levantó una plaquita, - vaya... parece que uno de los nuestros ha caido... jamás habría pensado que la droga no fuera suficiente como para acabar con cualquier adversario, tsché... un pequeño contratiempo...

El científico se giró y, de pronto de su espalda emergió lo que parecía ser una especie de reactor, con un ligero petardeo al principio comenzó a encenderse con una llamarada al tiempo que el cuerpo del científico se elevaba, al observar la escena el gyojin se quedó completamente de piedra, estaba escapando, ¡pero estaba volando a reacción!

Mientras tanto el titán observaba a Allen al tiempo que observaba su propio puño, el que había dejado un surco en el suelo del tamaño de una sandía, el gyojin no perdió la oportunidad de observar la posición de Allen, una mano enguantada sujetando la katana y otra mano sin guante, sabía de antemano lo que aquellas manos podían hacer y no dudaba de que la habilidad de Allen le permitiría salir indemne de aquel lance, pero sólo por si acaso...

- ¡¡¡Ooooooraaaaaaa!!! - el gyojin se lanzó al ataque blandiendo la katana con ambas manos, el titán se giró observando la carga y al movimiento descendente de la katana interpuso únicamente su propio brazo izquierdo, a pesar de la potencia del ataque la hoja no consiguió romper el hueso del antebrazo izquierdo del monstruo quedando encajada en el mismo, una sonrisa maquiavélica surcaba el rostro de la criatura al tiempo que levantaba el brazo derecho con intención de golpear al hombre pez, - ¡Allen, los tendones de Aquilies!

Prácticamente no había tiempo.